La investigación comenzó después de que un repartidor de una empresa de comida rápida denunciase, en el Área de Atención al Ciudadano del Puesto Principal de Pamplona de la Guardia Civil, haber sido atracado por un varón, el cual esgrimía un arma blanca de grandes dimensiones, tipo katana.
El atracador se llevó una riñonera con la recaudación de la noche de la víctima, más de 300 euros. Los hechos tuvieron lugar en el interior de un edificio de la localidad de Berriozar, ha informado en una nota la Guardia Civil.
Fruto de las investigaciones realizadas por el Área de Investigación del Puesto Principal de Pamplona de la Guardia Civil, en colaboración con Policía Municipal de Berriozar, se pudo identificar "de manera muy rápida" al autor, el cual ha sido detenido como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación.
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