Según las pruebas a las que fueron sometidas, las pilas podríanexplotar al ser expuestas a sobrecargas o a un uso intensivo, con elconsiguiente riesgo para la salud e integridad física de los usuarios de los aparatos eléctricos en las que donde estuvieran instaladas, así como los posibles daños de inutilización o por incendio.

En un comunicado, el Cuerpo policial ha precisado que, según los investigadores, el valor de venta al público de las pilasintervenidas ascendía a 28.200 euros.

La investigación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Bizkaia, perteneciente a la Jefatura Superior del País Vasco.