Un muerto y cuatro desaparecidos es el trágico balance del naufragio ayer del pesquero Cordero,  con base en Ribeira (A Coruña), a 30 millas de cabo Prior. El hundimiento se produjo a las dos y media de la madrugada, cuando el barco regresaba a tierra ante el fuerte temporal.

A bordo del Cordero iban ocho tripulantes. Pesqueros que acudieron en su auxilio y efectivos de Salvamento Marítimo lograron rescatar a tres  con vida y a un cuarto ya fallecido. Los supervivientes son el patrón, Marcos Ures García, de 29 años; el contramaestre, José Manuel Parada, de 30, y el marinero Hendra Hermawan, de 25.

El primero permanece ingresado en la UCI en estado grave, aunque no se teme por su vida. El contramaestre tiene heridas superficiales y el marinero no presenta «ninguna lesión reseñable». Ambos están en el hospital. El fallecido es el primer mecánico del Cordero, Francisco Alborada. Al cierre de esta edición no había rastro de José Alfonso Sotelo, Alberto Otero González, Rudiyanto y Stamet. Lo que sí se sabe es que el barco está hundido a 320 metros de profundidad y que la Xunta y el Gobierno investigarán las causas del naufragio.

El temporal dificulta la búsqueda

El temporal que azota Galicia, que mantiene a toda la comunidad en alerta naranja desde el lunes por la noche, obligó ayer a suspender la búsqueda de los cuatro marineros que continúan desaparecidos. Fomento garantizó ayer que en cuanto el tiempo mejore se volverán a poner en marcha todos los medios disponibles para encontrarlos. Se espera que sea hoy.

Precedentes

‘O BAHÍA’  2 de junio de 2004. Su naufragio costó  la vida a diez marineros.

Se hundió frente a las islas Sisargas. Fue el peor siniestro marítimo de los últimos años en Galicia.

‘Sempre Casina’ 22 de febrero de 2005. Se hundió a 21 millas de Ribadeo. Sólo sobrevivió uno de los nueve marineros que iban a bordo.

Cinco muertos y dos desaparecidos en diez días. 2008. Ya se puede hablar de un año negro en el mar gallego. Tres vuelcos de pequeñas embarcaciones costaron la vida a cinco marineros en las rías de Pontevedra  y O Vicedo y en el río Miño en apenas diez días. Además, están desaparecidos un hombre de Ferrol que recogía percebes y un marinero de Ribeira.