El empresario sevillano Javier Villanueva, que fue absuelto del asesinato de una fiscal boliviana, llegó este lunes, tras los casi cuatro años de conflictos judiciales a los que hizo frente en Bolivia, a Madrid procedente de Lima, en un vuelo de Air Comet, que aterrizó a las 5.45 a.m. en el aeropuerto de Barajas.

Javier Villanueva, que regresó con su novia boliviana, fue recibido por sus padres y por sus dos hermanos, con quienes viajará a su casa de Sevilla, aunque previamente visitarán al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para agradecerle sus gestiones.

Además de reiterar la honestidad e inocencia de su hijo, "demostrada ante tres instancias judiciales de Bolivia", agradeció "la solidaridad de toda la gente, la suerte, la ayuda divina y, aunque el Gobierno estuvo dubitativo al principio, después nos ha apoyado".

En este sentido, quiso agradecer el apoyo del cónsul general de Santa Cruz, del embajador de España en Bolivia, Francisco Montalbán y del Secretario de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica, Bernardino León, quien estuvo, agregó, "realmente soberbio".

"Ahora toca recuperar el tiempo perdido, así como recuperarse psicológicamente, tratar de recuperar y rehacer la vida en paz y en libertad", destacó.