La toma de medidas a mujeres de cinco municipios canarios completará los datos del estudio antropométrico que el Instituto Nacional de Consumo está llevando a cabo en toda España para unificar las tallas de ropa femenina. El viernes comenzó el proceso de medición en Santa Cruz de Tenerife, y en las próximas semanas lo hará en Las Palmas de Gran Canaria, Arico, Telde y Granadilla.

Selección aleatoria

En la capital tinerfeña, 94 mujeres han sido elegidas aleatoriamente del censo municipal para participar en las pruebas, coordinadas por el Instituto de Biomecánica de Valencia. El análisis se realiza por segmentos de edad entre los 12 y los 70 años.

Los fines de la iniciativa, que Consumo está desarrollando en colaboración con los principales fabricantes y creadores de moda, son proporcionar información homogénea a las consumidoras, confundidas ante la gran variabilidad actual de las tallas, y promover unos cánones estéticos saludables y reales.

Según datos del Ministerio de Sanidad, más de 500 jóvenes canarias presentan síntomas de padecer patologías relacionadas con desórdenes alimenticios como la anorexia y la bulimia.

No obstante, no son éstos los únicos problemas de salud relacionados con la alimentación que preocupan a los especialistas del Archipiélago. El estudio Enkid de la población española y un informe de la empresa de dietética Nutricare señalan a Canarias como la segunda comunidad autónoma, tras Andalucía, con mayor tasa de sobrepeso y obesidad, tanto en adultos como en niños.

Efecto perverso

Precisamente, la batalla contra la anorexia, en la que se enmarca el estudio para la unificación de tallas, y la lucha contra la obesidad son, para el Ministerio de Sanidad y Consumo, dos frentes de una misma guerra destinada a contrarrestar los efectos perversos de la publicidad en el ámbito de la salud pública.

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