Una madre le gritó a su hijo en público y un padre golpeó al suyo en un ojo. La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a 11 meses de prisión a un padre murciano que golpeó a su hijo y le causó erosiones en un ojo y artritis en un dedo. También ha condenado a una madre a cuatro días de localización permanente y a no acercarse a su hijo a menos de 300 metros por gritarle en presencia de los compañeros de trabajo de éste y de sus clientes.

Ambos casos ocurrieron en Murcia en 2007, pero las sentencias son firmes ahora.

El primero de los sucesos tuvo lugar en abril de 2007 en una vivienda familiar de una de las pedanía de Murcia.

N. G. propinó varios puñetazos a su hijo menor de edad durante una discusión. Uno de los golpes fue directo a un ojo, y otro, a la mano derecha.

Pese a que el acusado presentó un recurso en la Audiencia Provincial, éste no fue aceptado. N. G. tiene antecedentes penales: uno de ellos, por un delito de violencia en el ámbito familiar en 2006.

En Nueva Condomina

La segunda de las sentencias se refiere a una madre que llegó al trabajo de su hijo, en Nueva Condomina (Murcia), y «levantó la voz y recriminó» a su vástago delante de los clientes y sus compañeros de trabajo.