Los aficionados a la ópera tienen una cita imprescindible esta semana en las salas de cine. Todos los cines Yelmo de España que proyectan ópera estrenan este martes el documental The Opera House (Documentary), en el que se cuenta la historia de este templo neoyorquino de la música desde la inauguración de su segunda sede, en el Lincoln Center en 1966.

La encargada de dar vida a este proyecto ha sido la realizadora Emmy Susan Froemke (autora de The Audition), quien para darle forma ha utilizado filmaciones e imágenes de archivo pocas veces vistas o inéditas, entrevistas recientes y una maravillosa banda sonora con composiciones de Verdi, Puccini y Wagner.

El documental aborda el momento en que la Metropolitan Opera cambió de sede. La primera, ubicada en el 1411 de Broadway, había sido fundada en 1880 y abrió sus puertas en 1883. Aunque contaba con una excelente acústica y unos interiores muy elegantes, las instalaciones escénicas eran insuficientes. En 1966 se encontraría el espacio idóneo para su nueva ubicación en el Lincoln Center del Upper West Side.

Diseñado por el arquitecto Wallace K. Harrison, es el auditorio más grande de su tipo en el mundo, con un aforo de casi 4.000 butacas, y acoge unas 27 óperas al año con un repertorio rotativo que permite representar cuatro óperas distintas a la semana.

Harrison es, obviamente, una de las figuras de las que se habla en la película junto con Rudolf Bing, el gerente general que diseñó el cambio de sede, y Roberto Moses, planificador que arrasó con todo un vecindario para hacer espacio al Lincoln Center. Pero, sin lugar a dudas, la estrella principal de la cinta es la soprano americana Leontyne Price, la gran diva que debutó en el Met en 1961 en la obra de Verdi Il Trovatore y la encargada de la apertura de la nueva Metropolitan Opera House interpretando la primma donna grandeur en la obra de Samuel Barber Antonio y Cleopatra, con libreto escrito por el director cinematográfico y de ópera Franco Zeffirelli.

Price, retirada hace más de dos décadas, asegura que la Metropolitan es el auténtico "templo de la música". Curiosamente, el día de su debut, la soprano quedaría atrapada dentro de una de las estructuras de los escenarios móviles, lo que pudo poner en peligro el futuro de la institución. Afortunadamente para la historia, todo quedó en un susto.