Al menos 23 personas han muerto este martes, día de Navidad, y otras 77 resultaron heridas por la explosión de un coche-bomba conducido por un suicida en la ciudad de Biyi, en el norte de Irak, según informaron fuentes policiales.

Biyi se encuentra situada al norte de Tikrit, capital de la provincia de Salahedin, donde los grupos insurgentes vinculados a Al Qaeda mantienen una gran actividad.

El pasado jueves, otro terrorista suicida, esta vez con un cinturón de explosivos, causó la muerte a 13 voluntarios para patrullas vecinales y heridas a otros 10 en un centro de reclutamiento en la conflictiva provincia iraquí de Diyala.

Otro suicida actúa durante un funeral

En otro atentado suicida en la ciudad de Baquba, 65 kilómetros al norte de Bagdad, al menos han muerto cuatro personas y otras 21 resultaron heridas. El suicida detonó un cinturón de explosivos que llevaba adosado al cuerpo en un funeral.

La explosión se registró durante el funeral de un padre y su hijo que murieron el lunes en un ataque en la misma ciudad, capital de la provincia de Diyala. Las víctimas son todos civiles que asistían al funeral.

Hoy, otro atentado suicida con un coche bomba que se registró en la ciudad de Biyi, en la misma provincia, causó 23 muertos y 77 heridos, según fuentes policiales.