Así, según ha informado UGT en una nota de prensa, el pasado 24 de enero las partes firmaron dicho convenio, el cual tendrá una vigencia desde el 1 de enero de 2017 al 31 de diciembre de 2020 y afecta en la provincia aproximadamente a unos 4.000 trabajadores.

De este modo, el texto establece unos incrementos salariales del 1,3 por ciento para el año 2017, del 1,6 por ciento para el 2018, del dos por ciento para el 2019 y del dos por ciento para el año 2020.

Así, además de los citados incrementos, el nuevo texto supone el reconocimiento de la ultractividad garantizándose que hasta que no se firme un nuevo convenio el actual seguirá vigente y mejoras "considerables" en los derechos de los trabajadores que permiten también facilitar la conciliación de la vida personal y laboral como por ejemplo; una compensación económica para quienes presten servicios en domingos o festivos.

También se ha limitado el horario de apertura para los días 24 y 31 de diciembre y 5 enero, y una nueva licencia retribuida para los trabajadores con familiares hasta segundo grado en situación de ingreso de larga duración.

Han remarcado que la firma de este convenio colectivo supone "un logro" en cuanto a la defensa y protección de los derechos de los trabajadores, "dejándose notar el período de recuperación económica en el que el sector del comercio de alimentación se encuentra inmerso".