La Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia (ATH/ELE) ha denunciado que el 71,56% de las trabajadoras internas realiza el trabajo en condiciones ilegales en materia de jornada y descansos porque superan las 60 horas semanales que estipula la ley.

Estos datos han sido dados a conocer en una rueda de prensa celebrada en Bilbao por parte de la Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia (ATH/ELE), en la que han presentado la estadística de condiciones de trabajo en el empleo de hogar relativa a 2017.

Este estudio ha sido elaborado en base a la asesoría que realiza semanalmente esta asociación y que ha recogido información de 506 trabajadora, que, según ha indicado, es extrapolable al sector.

El 97,3% de las personas atendidas eran mujeres y el 60,07% de las consultas fueron realizada a trabajadoras externas y el restante, 39,93% a internas.

Del total de trabajadoras, un 41,77% son extranjeras no comunitarias, un 30,49% autóctonas, un 26,61% personas con doble nacionallidad y un 2,13% extranjeras comunitarias.

De entre las extranjeras no comunitarias, el 83,67% tenía "papeles", mientras que el restante 16,33% se encontraba en situación administrativa irregular. Entre las trabajadoras internas, el porcentaje de extranjeras no comunitarias se eleva al 72,02%.

La asociación ha denunciado que la gran mayoría de las trabajadoras internas realiza el trabajo en "condiciones ilegales" en materia de jornada y descansos. En concreto, algo más de 7 de cada 10 trabajadoras internas (71,56%) están a disposición de la parte empleadora más de las 60 horas semanales que estipula la ley.

Casi un tercio (29,36%) no tiene ningún descanso diario, entendido como la libertad de salir de la vivienda para dedicarse a sus propios asuntos, y un 21,56% no disfruta de ningún descanso semanal.

Los casos de internas cuyas condiciones laborales estaban bastante por debajo del promedio correspondían a trabajadoras sin papeles. Entre estas trabajadoras, que son el 16,33% del total de las internas, ha habido algunos "casos de explotación extrema" que, a su juicio, responde a la "falta de capacidad" de negociar condiciones laborales que sufre quien está en espera de obtener el permiso de trabajo.

A modo de ejemplo, ha denunciado que la cuidadora de una mujer enferma que vivía sola que trabajaba 101,5 horas semanales, sin descanso diario, ni festivos ni fines de semana, con menos de 10 horas de descanso nocturno y todo ello por 866,67 euros mensuales.

SALARIOS

Asimismo, ha asegurado que los salarios de las trabajadoras internas no se actualizaron en 2017 de acuerdo "con la subida de un 8% en el salario mínimo". Según ha señalado, en un 82,11% de los casos los sueldos de las internas casi nunca llegan al salario mínimo legal en relación con su jornada.

En el marco doméstico, las trabajadoras tienen "gran dificultad" para que se les reconozcan las horas semanales de trabajo que estánrealizando e incluso para demostrar los sueldos que cobran, ya que el 27,52% "recibe el salario en mano".

Por otra parte, casi una tercera parte (30,69%) de las internas no llega a tener 10 horas de descanso nocturno, porque las personas atendidas necesitan cuidados diversos. Un 3,96% de las trabajadoras de manera habitual no llegaban a las ocho horas de descanso nocturno.

Por otra parte, las trabajadoras han acudido a la asesoría con dolencias derivadas de la ausencia de información, formación y medios auxiliares. Según la asociación, las dolencias no solo eran físicas sino también psíquicas, como consecuencias de "la falta de descanso y oportunidades de vida personal al margen del trabajo".

Asimismo, ha manifestado que tampoco es "excepcional" el estrés derivado del "maltrato", que se concreta "en frases despectivas hacia su capacidad profesional, lo inmerecido del salario que cobran, así como los comentarios racistas y los acercamientos o proposiciones sexuales de carácter indeseado".

La asociación ha indicado que, en todos estos casos de "maltrato", las autoridades laborales no han dispuesto "mecanismos de intervención real y práctica en defensa de las trabajadoras".

Por otra parte, ha manifestado que, debido al fallecimiento o ingreso residencial del empleador, un tercio de las internas queda en paro de un día para otro y sin prestación de desempleo.

TRABAJADORAS EXTERNAS

Entre las trabajadoras externas, continúa siendo "alta" la falta de cobertura de Seguridad Social en los empleos de pocas horas. En concreto, en los tramos de 1 a las 15 horas la falta de alta en la Seguridad Social es "bastante mayor" que el año pasado.

Según la asociación, en los contratos de 1 a 5 horas, la falta puede estar relacionada con que el sistema no permite cotizar por salarios reales y, en el tramo de 40 a 50 horas, predomina el porcentaje de trabajadoras sin papeles entre quienes no están dadas de alta.

Sin embargo, según ha indicado, año tras año y en conjunto, se va incrementado el número de trabajadoras dadas de alta en la Seguridad Social. En concreto, en 2017 el 79,80% estaba dada de alta y la inmensa mayoría de las empleadas externas trabajan a tiempo parcial.

Los salarios entre las trabajadoras externas cumplen el SMI en casi todos los casos. En 2017 las trabajadoras contratadas solo para tareas domésticas suben hasta el 44,82%, seis puntos más que el año pasado.

Ante esta situación, ha señalado que el Gobierno Vasco "no está cumpliendo" los mandatos parlamentarios para controlar y mejorar la situación de las trabajadoras de hogar.

Esos mandatos, según ha recordado, eran, entre otros, la elaboración de informes sobre condiciones de trabajo y necesidades que cubren y otro sobre la viabilidad de incluir a las trabajadoras de hogar en las ayudas a la conciliación. A su juicio, el Gobierno Vasco prefiere "mirar hacia otro lado" y evitar así la necesidad de invertir en servicios de cuidado.