Ante las declaraciones del ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, de que había habido una respuesta "inmediata" de la Guardia Civil, Febrero afirma en su perfil de Facebook que la Guardia Civil local "sin medios, sí respondió", igual que "la gente de nuestros pequeños y abandonados pueblos", pero "todos iban a pecho descubierto" y su marido, "no sabía a que se enfrentaba".

Sobre Zoido, señala que "se nota que los asesinados no son su familia" porque "una respuesta inmediata no es lo que se hizo". Su marido "estuvo no se cuántas veces con la Guardia Civil" y "la última vez que lo vi, iba al cuartel" y "les ayudó todo lo que pudo", ha relatado.

Respecto a su asesinato, afirma que "podría haber sido cualquiera de esta zona, cualquier vecino, nuestros amigos agricultores, cualquier niño que acompañase a su padre a ver las ovejas, cualquiera".

Por eso, sostiene que "si la gente de este pueblo, por lo menos, hubiéramos sabido que eran tan peligroso seguro que ninguna esposa o madre les hubiéramos dejado ir al monte hasta que lo capturasen", pero "ni eso nos dieron, ya no digo medios, dispositivos policiales" porque "lo peor para mí fue que ni información clara con una gente honrada que, por lo menos, hubiera podido tener lógica y no ir al monte a trabajar hasta que capturasen al que se sabía era peligroso".

Agrega que "desde lo ocurrido en Albalate lo sabían" ya que "las pruebas eran contundentes", pero ahora "tengo rota la vida y tengo roto el corazón", si bien "no hablo desde el odio, ni el rencor", sino "desde sentir de que se engañó a muchas personas", cuando "hay que decir a la gente la verdad siempre", apunta la viuda de José Luis Iranzo.