El Ayuntamiento de València incrementará en 20 millones de euros el gasto destinado a personal el año que viene para desatascar proyectos, mejorar servicios y aligerar los plazos en la tramitación de sus procedimientos. Así, esta partida aumentará por segundo año consecutivo y lo hará en un 8%.

El Consejo Social de la ciudad ha analizado este lunes por la tarde las líneas maestras de las cuentas de 2018 en una sesión celebrada en el hemiciclo municipal y presidida por el alcalde, Joan Ribó, con presencia de portavoces de los grupos políticos y de entidades y organismos ciudadanos, como asociaciones vecinales y de consumidores.

En su conjunto, el proyecto de presupuesto municipal de 2018 contempla un volumen total de 811,3 millones de euros, un 3,1% superior al del actual ejercicio. El aumento de los ingresos en 24,5 millones de euros se produce, según el documento, sin aumentar la presión fiscal. De hecho, el recibo del IBI se mantiene inalterado para todos los inmuebles, pero crece la recaudación al poder cobrar las multas a vecinos de otros municipios que cometan infracciones en València, por la mejora en la gestión tributaria y en la inspección, tanto del impuesto de obras como de actividades económicas.

Además, suben las transferencias de la Generalitat para bienestar social (1,4 millones más), empleo (5 millones), fondos de cooperación municipal (3,2 millones) e inversiones productivas (12,2 millones).

Respecto al gasto corriente, aumentará en 7,3 millones de euros el próximo año, con aumentos en las partidas de bienestar social, movilidad sostenible, cultura y limpieza. En este último ámbito, Joan Ribó ha avanzado este lunes en una entrevista en 20 minutos que el aumento rondará los dos millones de euros.

En el capítulo de inversiones habrá un incremento de 9,6 millones de euros, un 16% superior al de este año. El esfuerzo inversor irá destinado a infraestructuras urbanas, renovación del patrimonio histórico, mercados, instalaciones deportivas, rehabilitación de viviendas, nuevos jardines y las actuaciones en el Cabanyal.

La deuda del Ayuntamiento se situará a finales de este año en 583,7 millones de euros. Desde julio de 2015 se ha reducido en 155,6 millones (un 21%), lo que deja el endeudamiento en el nivel más bajo en los últimos 15 años. Esto aligera la partida que el Consistorio destina a financiarla.

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, María José Broseta, ha pedido en el pleno que los datos económicos se traduzcan en mejores servicios para los ciudadanos, y ha exigido un incremento en materia de limpieza y poda. Además, ha solicitado representación vecinal en la Autoridad de Transporte Metropolitano.