El arranque de la historia de El otro tiene su epicentro en el asiento de al lado del vagón de un tren. El compañero de viaje, desconocido, casual y fugaz, se muere repentinamente. Es entonces cuando Juan Desouzas decide suplantar su identidad.
Desde ese momento vive otra vida y olvida por completo, o eso cree, las cosas que rodeaban la suya propia.
Y así comienza, sin ser consciente de ello, su viaje iniciático hacia la naturaleza, en el que se reencuentra con cuestiones esenciales que daba absolutamente por perdidas. Como bien dice su director, se aferra a la idea de que la vida que había vivido hasta entonces, no es la única posible.
En una película como El Otro, de las consideradas de personaje, la presencia de Julio Chávez, reconocido actor en Argentina, es fundamental. Rotter pensó en él desde el principio: «escribí el guión de la película pensando en él. Su imagen les daba vida a las escenas mientras las iba escribiendo».
La cinta ha merecido el Gran Premio del Público y el de Mejor Actor en el Festival de Berlín, así como el Quijote en Friburgo y el SIGNIS en Alba, Italia, este mismo año. Ahora compite en el festival gijonés.
* Hoy, a las 20.00 horas, en la sala 4 de los Cines Centro (Plaza San Agustín, s/n). 3, 5 euros.
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