Cinco personas de una misma familia - tres menores, la madre y la abuela- han muerto este martes en el choque entre un turismo y un camión en la carretera N-I, cerca de Pancorbo (Burgos), según han informado fuentes de la Guardia Civil y del servicio Emergencias 112 Castilla y León, mientras que el padre, que conducía el vehículo, ha resultado herido.

El suceso se ha producido sobre las 7.40 horas en el kilómetro 306 de la N-1, una carretera convencional de dos carriles y dentro de un tramo que a diario soporta una elevada densidad de tráfico, especialmente pesado, al ser una importante vía de comunicación entre la Meseta, País Vasco y Francia.

Al parecer, según fuentes de la Guardia Civil, el turismo, un Peugeot 607, invadió el carril contrario y chocó contra el camión, quedando después empotrado contra la pared del desfiladero. Ambos vehículos eran de matrícula francesa.

El conductor del camión, de nacionalidad polaca y de 55 años, ha resultado ileso aunque afectado por un shock nervioso. Los sanitarios que lo han atendido le han dado el alta in situ. Sin embargo, el conductor del otro vehículo, padre de los pequeños fallecidos de 4, 7 y 9 años, ha sufrido un fuerte impacto emocional, por lo que ha sido trasladado al Hospital Santiago Apostol de Miranda de Ebro (Burgos).

Hasta el lugar del siniestro se han desplazado efectivos de la Guardia Civil de Tráfico y Bomberos de Miranda de Ebro, pues los cinco ocupantes del turismo habían quedado atrapados en su interior.

También se ha enviado al lugar una UVI móvil, dos ambulancias de soporte vital básico y personal facultativo de Atención Primaria del centro de salud de Briviesca por parte de Emergencias Sanitarias Sacyl.

Los sanitarios sólo han podido confirmar la muerte de los cinco ocupantes del turismo. Las primeras investigaciones apuntan a que en el coche, de 5 plazas, viajaban 6 personas sin medidas de seguridad.

El Director General de Tráfico, Gregorio Serrano, ha lamentado a través de su perfil de Twitter, el fallecimiento "de 5 ciudadanos franceses (3 menores)" y "todos de la misma familia" que han fallecido en el accidente.

Desde hace siete años, una plataforma de vecinos afectados por la alta siniestrabilidad de la N-1 reclama la liberalización del peaje de la AP-1 en el tramo comprendido entre Burgos y Pancorbo, donde se ha producido este accidente, para evitar la elevada cifra de víctimas mortales.

La Plataforma de Afectados por la N-1 asegura que el Ministerio de Fomento y el Director de la DGT han "ignorado" durante años sus demandas. La plataforma denunciaba que “la N-1 no reúne unas condiciones de seguridad suficientes para la intensidad de tráfico que soporta y resulta del todo necesario derivar tráfico a la AP-1 liberando esta del peaje”.

"Es muy mala, la peor. Hay mucho tráfico, mucho camión. Es muy peligrosa", aseguraba uno de los camioneros que suelen recorrer la N-1 y que reconocía, en un reportaje publicado por el Diario de Burgos, que a los "cruces criminales" de la carretera hay que sumarle "la falta de paciencia de muchos conductores" que tienen prisa por adelantar en una carretera sin mucho espacio para estas maniobras.