El número de ahogamientos en España se cifró en 305 personas a fecha 31 de julio, según el último informe de La Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (RFESS).

Los datos arrojados por la entidad privada sin ánimo de lucro muestran al mismo tiempo un aumento en 39 personas respecto a la misma fecha del ejercicio anterior, un 14,99% más. Igualmente, el 75% de las personas que se ahogan en nuestro país son de nacionalidad española (231), mientras que el 14% son ciudadanos de los otros países de la Unión Europea.El resto son habitantes procedentes de África, América y Asia.

Además, como era de esperar, los meses del estío son los que peores datos presentan. El pasado julio perecieron 95 personas (31,1%), siendo así el mes con más muertes por este tipo del año. Junio con 70 ahogados (23%), completa un verano que suma un 54,1% de muertes del total.

Por edades, las personas comprendidas entre los 65 y 74 años suman un 17,4% del total, seguido de los mayores de 75 años, que ascienden a un 15,4%.

Asimismo, el informe refleja las comunidades con el mayor índice de ahogados. Andalucía con 57 personas (18,7%) es donde más muertes se han producido. Así, le sigue Galicia y Canarias, con un 14,8 y un 13,8% respectivamente.

En cuanto a la seguridad, el 91% de las personas ahogadas no estaba bajo ninguna vigilancia. Según el estudio, el 50% de las muertes se producen en playas mientras que en piscinas y ríos el 23%.

Para el director de la Escuela Española de Salvamento y Socorrismo de la RFESS, Alberto García Sanz, los principales factores implicados en los accidentes suelen ser los producidos por imprudencias, ya sean saltos al agua como mortales, empujones o golpes producidos por choques entre usuarios o rocas. En lo que llevamos de agosto, otras 15 personas han fallecido ahogadas. Las cuatro últimas en las playas de Cataluña.