El Registro Central para la Protección de las Víctimas de Violencia Doméstica tiene fichados a 7.222 residentes en Aragón. Es un registro en el que figuran las identidades de los denunciados por maltrato, aunque no estén condenados, y que facilita la tarea de los jueces y la protección de las víctimas.

Este registro empezó a funcionar en abril de 2004, y hasta final de 2005 había 2.356 registrados. Sin embargo, el núméro de inscritos se ha disparado y sólo en lo que va de año (20 de noviembre) ya se han registrado 2.132 presuntos maltratadores más.

La mayoría son hombres (1.972), pero también hay mujeres en la lista del registro (160), aunque sólo suponen el 7,5% del total. Por provincias, en Zaragoza es donde más se ha fichado, 1.780. En Huesca hay 280 y en Teruel, 72.

Casi el 40% de los presuntos agresores son extranjeros (846), cuando hace dos años eran el 30%. Esto tiene que ver con el incremento de la población inmigrante, que se ha multiplicado por cuatro en los últimos cinco años.

El registro es una base de datos informatizada de las penas y medidas de seguridad acordadas en caso de malos tratos, que recoge también las identidades de los denunciados y las órdenes de protección dictadas. Por tanto, los que aparecen en la lista son presuntos maltratadores, que se eliminarán de la lista si por sentencia firme se cancelan las denuncias en su contra y se demuestra que es inocente.

656 órdenes de protección

En lo que va de año, el Instituto Aragonés de la Mujer ha recibido 656 órdenes de protección. Por provincias, en Zaragoza se concedieron 500 (427 en la capital), en Huesca la cifra fue de 127 (79 en la capital) y en Teruel de 29 órdenes de protección (22 en la capital). En el segundo trimestre del año se incumplieron 34 de estas órdenes.

El problema de la violencia doméstica sigue aumentando y cada vez hay más denuncias, a pesar de que muchas mujeres aún se niegan a ir a los tribunales y sólo el 10% de las denuncias son presentadas directamente por la víctima.

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