El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, advirtió hoy de que el sector público puede "descarrilar" si se acometen "grandes" rebajas de impuestos, por lo que indicó que las rebajas impositivas deben ser "suaves y moderadas".

"No podemos reducir los impuestos más allá de lo que el crecimiento económico nos permita", señaló Ocaña, que inauguró hoy las jornadas de la Asociación del Progreso de la Dirección (APD) sobre los Presupuestos Generales del Estado de 2008.

Así, abogó por mantener una política fiscal "prudente" y por asegurar el superávit público cosechado en los últimos años.

En cualquier caso, Ocaña afirmó que en la próxima legislatura también habrá "margen" para seguir bajando los impuestos, después de las rebajas del IRPF y del Impuesto sobre Sociedades acometidas por el Gobierno en estos cuatro años.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, prometió el pasado fin de semana una "profunda reforma fiscal" por la que todos los que ganen al año menos de 16.000 euros estén exentos de pagar el IRPF, lo que beneficiaría a siete millones de españoles que hoy sí pagan ese impuesto.