El titular del juzgado número 2 de Ávila ha dictado una providencia en la que llama a declarar a quince nuevos imputados, que se suman a los cuatro que ya han declarado, así como a otros doce testigos en el caso de la 'Ciudad del Golf' de Las Navas del Marqués (Ávila).

Según ha informado hoy en nota de prensa la Asociación Ecologista Centaurea, entre los llamados a declarar como imputados figura el actual director general del Medio Natural de la Junta de Castilla y León, José Ángel Arranz.

De esta manera, el juez ha admitido la proposición de nuevas diligencias que realizó el abogado de este colectivo ecologista y la Sociedad Española de Ornitología días después de la declaración del alcalde de Las Navas, Gerardo Pérez, del PP, último en declarar como imputado.

Previamente ya lo habían hecho, con la misma condición, el ex director general del Medio Natural, Mariano Torre, el ex delegado territorial de la Junta en Ávila, Félix San Segundo, y el secretario del Ayuntamiento de Las Navas, Carlos de la Vega.

Tala para hoteles

Esta nueva decisión del juez obliga a declarar como imputados los días 26 y 27 de noviembre a quince personas, entre las que figuran los ocho miembros de la Comisión de Urbanismo de Ávila que junto a alguno de los imputados que ya han declarado, votaron a favor de la recalificación como suelo urbanizable de terrenos pertenecientes a la ZEPA/LIC "Pinares el Bajo Alberche" y a Zona de Importancia para la Cigüeña Negra "Núcleo del Alberche".

Asimismo, han sido llamados a declarar en esta misma condición seis funcionarios de la Consejería de Medio Ambiente y de la Consejería de Fomento que informaron a favor del proyecto, incluidos el que hoy es director general del Medio Natural, José Ángel Arranz Sanz, y el jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente de Ávila, Juan Manuel Pardo Ontoria.

Además, deberá declarar como imputado Francisco Gómez Hernández, conocido como 'El Paloma', Representante Legal de 'Residencial Aguas Nuevas, S.L.', promotora de esta urbanización que incluía la construcción de 1.600 viviendas, un campo de golf y dos hoteles de lujo.

Para construir la urbanización se llevó a cabo la tala de miles de pinos a principios de octubre de 2006, poco después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León declarase nula la recalificación de esos terrenos como urbanizables delimitados, por estar protegidos.