La sala permite realizar estudios contratados con fluoroscopia y procedimientos intervencionistas que ahorran intervenciones quirúrgicas, ya que se pueden hacer por radiología intervencionista y dan respuesta a las necesidades del territorio al evitar derivar algunas intervenciones a Barcelona.

La inversión realizada en el equipamiento, las obras menores para la adecuación de la sala y el mobiliario clínico y pequeño equipamiento -radioprotección- ha sido de un total de 689.500 euros.

La sala está equipada con un telemando híbrido, que tiene más prestaciones que un telemando normal y menos que un DIVAS o sala clásica de intervencionismo vascular.

El objetivo de este nuevo servicio es implementar una ampliación de la cartera de servicios en intervencionismo -mínimamente invasivo y con menor dosis de radiación- guiado por la imagen en el IDI, en la provincia de Tarragona.

Para llevar a cabo este proyecto, dos radiólogos van al Hospital de Bellvitge a realizar formación a la vez que un especialista de este hospital visita el Joan XXIII para hacer este tipo de intervenciones: se harán 200 este año y 400 en 2018.