Con la nueva norma se paga en función de la categoría de la calle que, a su vez, viene determinada por el impuesto de actividades económicas. Hasta ahora, Valencia se dividía en tres zonas perimetrales (que dependían de la proximidad de la calle con el centro de la ciudad) y en cada una había una tarifa.

Ahora, las categorías van del 1 al 7 y éstas se agrupan en tres zonas. La zona 1 la forman las calles con categoría 1 y 2; la zona 2, las calles con categoría 3, 4 y 5; y en la zona 3 están las calles con categoría 5, 6 y 7.

Así, los vecinos de la avenida de Aragón, que hasta el momento pagaban vados como zona 3 (la más barata por estar lejos del centro), pasarán ahora a zona y categoría 1 (la más cara). Lo mismo sucede con la avenida del Puerto y la calle Serranía, que pasan de zona 3 a zona 2 (o sea, que sus vados se encarecen).

En cambio, calles que se encuentran en el centro de la ciudad y que antes pagaban como zona 1, ahora lo harán como zona 3 (más barata). En este caso se encuentran, entre otras, las calles Linterna, Guillem Sorrolla, Na Jordana, Carniceros y Pelayo.

Con este nuevo sistema de cobro, el Ayuntamiento obtendrá 250.000 euros.

Las tarifas de los vados en Valencia dependen de la zona en la que se encuentren. Los ubicados en la zona 1 pagarán 231 euros anuales. Los de la zona 2, 115 euros, y en la zona 3, serán 57,73 euros anuales. El concejal socialista Juan Ferrer ha indicado que, con el cambio de los precios, «ganamos todos, ya que en zonas nuevas, como Cortes Valencianas o la avenida de Francia, los usuarios pagarán por el servicio que realmente se les ofrece».