De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología ha activado el aviso naranja por riesgo importante en ambas zonas. En el Pirineo se esperan rachas de viento de hasta 100 km/h entre las 4 y las 12 horas de mañana jueves, y entre las 6 y las 11 horas de este viernes. Por su parte, en la vertiente cantábrica es probable que se alcancen los 90 km/h en los tramos horarios señalados.

Por ello, el Servicio de Protección Civil recuerda una serie de recomendaciones para evitar accidentes como consecuencia del fuerte viento. Así, en el interior de los edificios aconseja cerrar y asegurar puertas, ventanas y toldos, además de retirar o fijar los objetos del exterior que puedan ser arrastrados por el viento, sobre todo en balcones y terrazas.

Si se camina por la vía pública, se debe evitar aproximarse a edificios en construcción o en mal estado, especialmente si cuentan con cornisas y marquesinas, así como a las grúas, andamios o árboles que pudieran desprenderse y caer. Si se está en el campo, en ningún caso se debe encender fuego y se debe eludir las zonas nevadas y en pendiente, ante la posibilidad de que se produzcan aludes.

En el caso de conducir un vehículo, además de informarse de las condiciones meteorológicas, se deben extremar las precauciones ante la posible presencia de obstáculos en la calzada. También se aconseja a los y las conductoras que sujeten con fuerza el volante y que reduzcan la velocidad, especialmente durante el cruce con vehículos voluminosos que circulen en sentido contrario, ha informado el Gobierno foral en una nota.