La coreógrafa Coco Comín y su escuela de baile se embarcan en el primer musical de creación propia producido por este grupo de referencia en Barcelona en lo que a danza se refiere.

Moustache, The Rythm Musical Comedy se estrenó el pasado diciembre en el teatro Apolo y se basa en el ritmo del claqué como elemento coreográfico central, aderezado con una orquesta en directo y con dosis de humor en escena.

Comín asegura que casi todo lo que se ve en Moustache ha surgido de su imaginación. La creadora se enfrenta a su vigésimo noveno musical, pero lo más importante, al primero como responsable del guión y de la dirección interpretativa.

La artista ha coreografiado en los últimos 25 años algunos de los musicales que más éxito han cosechado en nuestro país, desde Chicago a Fama o Grease, y que en su mayoría son adaptaciones de producciones norteamericanas e inglesas. Por ello, quería "empezar de cero" y ponerse en solitario al frente de un montaje  musical "grande" para entrar en un mundo "desconocido de luz, de color, de reír y llorar".

En Moustache se explica mediante baile y canciones la historia de los personajes del Moustache Music Hall, un local de espectáculos para la clase obrera londinense de principios del siglo XX, principalmente hombres con bigote, y que tiene en Max, un famoso comediante y bailarín, a su primera estrella.

Comín ha contado con la valiosa colaboración para este montaje propio del coreógrafo de claqué Sharon Lavi, un firme defensor de que esta disciplina "intervenga y se fusione con otros lenguajes de las obras escénicas".

El reparto de esta obra musical lo forman 9 actores y cantantes y 10 bailarines, todos especialistas en claqué y para Comín, además, "un músico más del montaje". A partir de 30 micrófonos escondidos por el escenario se amplía la sonoridad de este montaje musical.

En Barcelona y Catalunya se han asentado en los últimos años numerosos profesionales de esta disciplina llegados de todo el continente europeo, entre ellos, bailarines que han pasado por la escuela de Coco Comín y gracias a los cuales, la coreógrafa catalana ha podido ir preparando durante los dos últimos años la producción Moustache y como ahora se presenta al público.