¿Le gusatría que la Comisaría volviera al Patio de Banderas? ¿Y que la plazas acogiera una cripta arqueológica y una zona de equipamiento cultura de la ciudad? ¿Y si cada sevillano pudiera dar su opinión del uso de este espacio, la plaza del Triunfo o los jardines de Murillo? El Patronato del Alcázar quiere que los ciudadanos decidan qué uso se le puede dar a las 17 hectáreas que componen el entorno del conjunto histórico del monumento.

Para ello, van a redactar un plan que estudiará una a una las casas, plazas, calles, fuentes y jardines que lo rodean.

Uno de los retos es recuperar las 19 casas que formaban parte del conjunto monumental y que hoy se encuentran en manos privadas e instituciones públicas. Ocho de ellas están en el Patio de Banderas y otras once en el barrio de Santa Cruz, plaza de la Contratación y la calle San Fernando, cuya titularidad fue ya reclamada en la II República, por el Consistorio hispalense. Entre estos edificios se encuentra la antigua sede de la Consejería de Obras Públicas, en la Plaza de la Contratación y la Casa de la Judería.

El plan, con 119.700 euros de presupuesto, estará listo en tres años y medio.

Trabajarán en él un equipo multidisciplinar de arqueólogos, historiadores, economistas y abogados, dirigidos por los arquitectos Rafael Muro y Vicente Llanos.

Dichos profesionales decidirán también la viabilidad jurídica y económica de llevar a cabo las expropiaciones, sobre todo las no protegidas de la calle San Fernando para abrir nuevos accesos al Alcázar.

El plan especial unificará criterios sobre cómo se deben proteger y restaurar las casas: tipo de materiales a utilizar, color, fachada, etc.

Una vez que el plan esté listo pasará a la Gerencia de Urbanismo y luego, al periodo de alegaciones. Los sevillanos podrán conocerlo en una exposición pública que se realizará en el patio del Apeadero.

Guardería del Alcázar

Además, el Ayuntamiento negocia ya con la Consejería de Igualdad una nueva ubicación para la guardería de los Jardines de Murillo, ubicada en la antigua huerta del Alcázar y que abrió durante la dictadura como centro de auxilio social. La idea del Consistorio es aprovechar estas dependencias de 1.200 metros cuadrados como centro de interpretación del monumento.