El desfile militar que se celebra cada año con motivo de la Fiesta Nacional del 12 de octubre finalizó sin incidentes en el Paseo de la Castellana de la Comunidad de Madrid.

Los Reyes presidieron el acto en la Plaza de Colón de Madrid. Los acompañaron en la tribuna principal el presidente del Gobierno, del Congreso y del Senado, ministros y autoridades nacionales, autonómicas y locales.

El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, fue recibido con gritos de "Zapatero, dimisión", mientras que los Reyes fueron vitoreados.

Los asistentes, escucharon con total respeto el himo español. El público se quedó asombrado cuando en el cielo se vislumbraron tres paracaidistas de la Patrulla Acrobática de Paracaidistas del Ejército del Aire (PAPEA) que descendieron de los cielos madrileños paseando los colores rojo, amarillo y rojo correspondientes a la bandera nacional española.

Se rindió homenaje a la bandera y a los caídos por España antes de comenzar con los desfiles aéreo- con 86 arenoaves-, y terrestre, en el que tomaron parte 4.409 hombres y 309 mujeres, y 205 vehículos, según informó el Ministerio de Defensa.

Desfile aéreo

Las unidades de ataque abrieron el desfile aéreo, con la destacada presencia de los F-18 y los Eurofighter, entre otros reactores supersónicos como los Mirage F-1 y los F-5. Posteriormente, llegó el turno de las aeronaves de transporte, representadas por los C-295, los CN235 y un Hércules C130. El avión de patrulla marítima P3 Orion dio paso a la exhibición de reabastecimiento en vuelo que realizará un Boeing 707 con dos cazas F18.

En el grupo de helicópteros se exhibieron los modelos SuperPuma, Cougar, EC135, Tigre, SeaHawk y Sikorsky, entre otros aparatos. Tras ellos, llegaron los aviones 'apagafuegos', los CL215 T del 43 Grupo del Ejército del Aire, también conocidos como 'botijos', que precedieron en la exhibición al avión AWACS E3A, de la Flota de Alerta Temprana de la OTAN, en su primera participación en el Día de la Fiesta Nacional.

La aeronave de la Alianza Atlántica, un Boeing 707 con varias modificaciones y dotado de un radar de gran alcance y característica silueta, tiene capacidad para controlar un área de 312.000 kilómetros, con lo que apoyada por otras dos aeronaves del mismo tipo puede vigilar un área similar a toda Europa Central.

La Patrulla Águila , con sus siete reactores C-101 de la Academia General del Aire, pusieron el punto y final a la exhibición aérea dibujando en el cielo los colores de la bandera nacional.

Desfile terrestre

Abrió el mando de la fuerza una sección motorizada de la Guardia Real y la Unidad Ligera Motorizada.

Tras los veteranos de los Ejércitos y la Guardia Civil, llegaron con sus vehículos todoterreno los mandos de la Brigada de la Legión y los del Mando de Artillería Antiárea. En este bloque, participaron por primera vez dos vehículos blindados sanitarios tipo BMR (Blindado Medio de Ruedas).

Posteriormente, la Unidad Militar de Emergencias desfiló con sus modernos vehículos de transmisiones y autobombas, antes de reaparecer con su boina amarilla y su uniforme negro con el resto de unidades a pie.

Tras el paso de la UME, llegó el momento de los vehículos pesados, con los carros de combate Pizarro y Leopard de la Brigada de Infantería Acorazada Guadarrama XII.

Homenaje a los cascos azules de Líbano

Los abanderados de los países que participan en la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) fueron los primeros en desfilar a pie por el Paseo de la Castellana en homenaje a la operación de la ONU para mantener la paz entre Israel y Líbano.

La Brigada Multinacional española ha sufrido un total de seis bajas en Líbano, todas ellas fallecidas en el atentado perpetrado contra un

Los reservistas voluntarios volvieron a participar en la parada militar y este año lo hicieron por vez primera a pie. Posteriormente, aparecieron los cadetes, los batallones de Guardia Civil, Tierra, Aire y Armada y la compañía de la Unidad Militar de Emergencias.

En la parte final del desfile, marchóá una bandera de la Legión, con su característica cadencia de paso (140 pasos por minuto) y un tábor de Regulares, también con paso específico (90 pasos por minuto). El desfile lo cerraron unidades a caballo, con una sección hipomóvil de la Batería Real y un escuadrón de Sables de la Guardia Civil.

Novedades de este año

En esta ocasión, los cascos azules tuvieron un reconocimiento especial. El pasado año, el desfile se dedicó a la misión de paz de Kosovo y en 2005 se invitó a los ejércitos de países iberoamericanos.

Entre las novedades de este año se incluyeron el desfile a pie de una compañía de Reservistas Voluntarios, y el paso de un avión AWACS de la Fuerza de Alerta Temprana y Control de la OTAN (cuyo coste es de 70 millones de dólares), que cumplen este año su 25 aniversario.

Unidades a caballo de la Guardia Real y el Escuadrón de Sables de la Guardia Civil cerrarán el desfile.