Las feministas defienden el uso de la prenda islámica. El cardenal y arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, aseguró ayer que el debate sobre el velo islámico no se puede zanjar con un «sí o un no», sino que debe haber matices, ya que si se considera «fundamental» para una religión, hay que admitirlo. Cañizares afirmó  que la libertad religiosa es para todas las confesiones, aunque los inmigrantes «deben asumir» las costumbres del país al que llegan.

Por otra parte, organizaciones feministas reunidas ayer en Granada defendieron  el uso del velo en los colegios, ya que anteponen otros derechos humanos en las mujeres, como la tolerancia religiosa y la libertad de pensamiento. Estas feministas creen que hay que respetar la manera en que las mujeres musulmanas «se sienten mejor, ya sea por pudor o porque les mueva su fe religiosa». Aceptando esta idea, «no se penalizará a las mujeres por llevar el velo islámico», según declaró a Efe la presidenta del Centro de Estudios de la Mujer, Margarita Birriel.