La infancia de estas jovencísimas cordobesas de apenas 13 años no ha sido precisamente fácil. Sara, Marina y Melody viven en uno de los barrios más desfavorecidos de su ciudad y se han pasado media vida en la calle. Aquí fue donde se conocieron y aprendieron el compás del ritmo flamenco.
Luego, al poco tiempo, Juan Fernández Panky, antiguo guitarrista de Cherokee, y Cesáreo Moreno Güito escucharon a las tres chicas y se convirtieron en sus productores.
Una ilusión hecha realidad
La creación de las canciones, la maqueta y los viajes a Madrid fueron el siguiente paso en el camino de Las Chuches, que tras el éxito de Cómo ronea, el verano pasado, vienen dispuestas a hacernos bailar al ritmo de El pantalón, otra rumbita bailable a la que no le falta ni su propia coreografía.
Sus voces son flamencas y frescas y su recitar tiene algo de hiphopero, aunque con una gracia innata difícil de imitar. Ahora están ilusionadas: el público conoce y disfruta sus canciones. «Comprar un chalet pa nuestros padres», es el suelo de sus vidas y está cada vez más cerca.
Las Chuches han sabido reinventar y poner al día esos ritmos que a todos nos resultan familiares y que recuerdan, irremediablemente, a las músicas de Las Grecas, Los Chunguitos o Los Chichos.
* Sala Boga-Boga. Centro de ocio Plaza Mayor. A-7, salida parador de golf. Hoy a las 23 horas. Precio: 15 euros anticipada y 20 en taquilla.
‘Al compás de los sueños’
Es el nombre del taller organizado por la asociación Educadores del Flamenco para desarrollar en los más jóvenes lo que llevan en la sangre desde que nacieron. Aquí fue donde Las Chuches
se conocieron y dieron sin más rienda suelta a su arte.
se conocieron y dieron sin más rienda suelta a su arte.
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