Cuando los policías llegaron a la vivienda escucharon los gritos y golpes desde el exterior y como la puerta estaba cerrada tuvieron que tirarla abajo para acceder y reducir al agresor, que, según ha informado la Policía en un comunicado, estaba armado con unas tijeras con las que amenazó a su suegro y a los agentes.

Los agentes conocieron los hechos tras el aviso de algunos vecinos en el 091 sobre una disputa familiar en un domicilio del centro de Sevilla en la que se escuchaban fuertes golpes e insultos.

Cuando los agentes llegaron al lugar observaron que desde el interior de la vivienda se escuchaba una fuerte discusión y golpes, por lo que, tras intentar que les abrieran la puerta sin éxito, tuvieron que tirarla abajo ya que, además, la víctima pedía auxilio a los policías.

Al acceder al interior del domicilio, los agentes se encontraron con un hombre armado con unas tijeras que amenazaba a otro y a su vez a los policías, todo ello en presencia de una menor de tan solo cuatro años, por lo que tuvieron que desarmarlo y reducirlo para detenerlo, ha añadido la Policía.

La víctima, que tuvo que ser atendida por los servicios médicos por los golpes recibidos, relató a los agentes que el detenido era su yerno y que tras llegar a casa había empezado a destrozar el mobiliario, a golpearle y a amenazarle hasta tal punto que tuvo que quitarle varios cuchillos que el agresor cogió de la cocina con la intención de utilizarlos contra él.

Los agentes tuvieron que asistir también a la hija del detenido que presenció la disputa y la puso a disposición de su madre, que no se encontraba en el domicilio porque estaba trabajando, y que manifestó a la Policía, según el comunicado, que en ocasiones había sufrido malos tratos por parte de su marido también.

De esta forma, una vez conocidos los antecedentes de los hechos, el detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial por su presunta participación en sendos delitos de malos tratos sufridos por su suegro y su mujer.

Por su parte, uno de los agentes que llevaron a cabo la detención y que pertenecen al Grupo Hércules de la Comisaría de Distrito Centro tuvo que ser atendido por unos cortes en los brazos producidos al tirar la puerta del domicilio para acceder al interior.