El consejero del ramo, Andrés Carrillo, ha aclarado que esta orden de cierre "no afecta ni a nóminas, ni a proyectos de fondos europeos ni a políticas sociales ni a gastos menores, porque no se puede paralizar la Administración".

Ha puntualizado que la orden de cierre que se publica este viernes quiere decir que, a partir del 31 de octubre, "no se podrán adquirir nuevos compromisos y no se podrán iniciar obras". Sin embargo, ha precisado que "sí se pueden ejecutar todas las actuaciones que ya están iniciadas".

Ha admitido que la Comunidad, con "déficit excesivo los años anteriores", debía "anticipar" su cierre, tal y como hizo el Estado en el mes de julio "para facilitar el cumplimiento conjunto de los objetivos de déficit".

El consejero ha señalado que el cierre presupuestario en la Región de Murcia "se ha retrasado al máximo, hasta el 31 de octubre, debido precisamente a que la Comunidad fue muy responsable en la confección del Presupuesto para 2016, y es un Presupuesto ya de por sí austero".

"Este Gobierno se ha propuesto llegar al equilibrio presupuestario a final de la legislatura", ha señalado Carrillo, quien ha remarcado que los datos "son de por sí muy reveladores, ya que en el mes de julio de 2016 hemos tenido mucho menos déficit que en julio de 2015, pasando de 357 millones a 153 millones, es decir, 204 millones menos de déficit".

Ha destacado que la Comunidad de Murcia "está inmersa en un proceso responsable para reducir paulativamente el déficit público" y, a su juicio, los datos "demuestran que vamos por el camino acertado en esta reducción paulativa del déficit".

"Venimos de una crisis que ha supuesto una bajad drástica de los ingresos de las administraciones públicas y había que mantener, sin embargo, los servicios públicos fundamentales de Sanidad, Educación y Política Social", ha concluido.

Por eso, durante estos años hemos tenido unos déficits elevados, pero una Región no puede mantener esta situación de desequilibrios, es decir, de más gastos que ingresos, de manera indefinida".