Agentes de la Guardia Civil han detenido al responsable de un local clandestino de venta y elaboración de productos cárnicos ubicado en Vigo, y que proveía a comercios y restaurantes del área metropolitana, sin cumplir las exigencias higiénico-sanitarias.

Según han informado fuentes del Instituto Armado, la investigación se inició a raíz de la detención, en mayo pasado, del empleado de una empresa cárnica de O Porriño (Pontevedra), acusado de un delito continuado de hurto de carne.

Las pesquisas permitieron descubrir que este trabajador llevaba un año sustrayendo carne de su empresa, que acababa en un almacén de Vigo. Desde este local clandestino, que presenta importantes deficiencias en cuanto a instalaciones y maquinaria, se distribuía a minoristas y restaurantes de la ciudad olívica y del área metropolitana.

En una inspección del almacén, la Guardia Civil comprobó las malas condiciones del local, sin las mínimas exigencias higiénico-sanitarias para la manipulación de un producto que llegaba al mercado alimentario de forma totalmente ilegal, sin controles sanitarios, y con el consecuente riesgo para la salud de los consumidores.

Así, los agentes intervinieron unos mil kilos de carne, y comprobaron que algunos productos incluso estaban envasados con etiquetas de otras empresas cárnicas de reconocido prestigio.

20 LOCALES IDENTIFICADOS

La Guardia Civil ha logrado identificar una veintena de restaurantes y establecimientos que se abastecieron en este punto de venta clandestino, y están siendo sometidos a inspecciones por parte de los servicios sanitarios de la Xunta de Galicia.

El responsable del almacén de carne ha sido detenido, investigado por un supuesto delito contra la salud pública, y otro de receptación por abastecerse con la carne robada. La Guardia Civil no descarta nuevas identificaciones.