Según ha informado el departamento vasco de Seguridad, los hechos se iniciaron sobre las cuatro de la madrugada del pasado martes, cuando los componentes de una patrulla de protección ciudadana de la Ertzaintza detectaron un fuerte olor a marihuana procedente de una finca en el barrio de Ventas de Irun.

Los agentes se dirigieron a pie a realizar una inspección para determinar la procedencia del olor. Al adentrarse en una zona de huertas advirtieron que les estaban disparando desde una ventana de una vivienda colindante.

Al dirigirse al inmueble del que procedían los disparos, apareció un varón que arremetió contra los agentes con una estaca. Estos pudieron repeler el ataque y procedieron a desarmar y neutralizar al agresor, mientras seguían percibiendo detonaciones de disparos.

Seguidamente accedieron al inmueble y localizaron en su interior a una joven, hermana del varón, a la que arrestaron como presunta autora de los disparos. Ante la llegada de los agentes, la mujer había arrojado por la ventana el arma, que fue localizada poco después junto a la casa. Se trata de un pistola de aire comprimido de tiro olímpico de 4,5 mm de calibre.

Tras las detenciones, los agentes localizaron junto al inmueble la plantación de marihuana, compuesta por varias decenas de ejemplares, una zona destinada al secado de las plantas y otra específica para la separación de los cogollos.

En los accesos a la plantación se habían dispuestos varios artilugios colocados a modo de trampas, con palos cruzados y clavos boca arriba, preparados para causar lesiones a quienes trataran de acceder al recinto. Los dos arrestados serán puestos a disposición judicial una vez ultimadas las correspondientes diligencias.