"Hay desaparecidos de primera, segunda y hasta de quinta clase, pero no es culpa de nadie"

Joaquín Amills, presidente de SOSdesaparecidos.
Joaquín Amills, presidente de SOSdesaparecidos.
ARCHIVO
Joaquín Amills, presidente de SOSdesaparecidos.

Joaquín Amills perdió a su hijo hace ocho años (11 de septiembre de 2008), una desaparición que le cambió la vida. Ahora, desde la asociación que preside, SOSdesaparecidos, aspira a ayudar a otras familias y a "saber la verdad" sobre lo que le ocurrió a su hijo.

SosDesaparecidos busca la pista de Diana Quer en Europa...

Sí. No es un caso excepcional, forma parte de nuestro protocolo. Cuando ha pasado un tiempo y no hay pistas activamos las alertas internacionales, primero donde tenemos delegaciones (Francia, Bélgica, Portugal y Suiza) y luego en otros países con los que tenemos acuerdos. Ya se ha distribuido la alerta de Diana también en Polonia y Grecia.

¿Podría haber salido de España a pesar del amplio dispositivo de búsqueda?

Todo es posible. Estamos hablando de la Unión Europea, con libertad de movimiento de personas. Son muchísimos los casos en los que ciudadanos españoles han sido localizados fuera de nuestro territorio.

Pero pensar en el extranjero... ¿no suena a un posible caso de trata de personas o secuestro?

No necesariamente. Todas las hipótesis están abiertas. Se puede haber ido voluntariamente, porque tiene un conocido o una amiga residiendo en el extranjero. Ocurre. Cuando tenemos que actuar hay que abrir todo el abanico de posibilidades que podamos. En el caso de Diana, su ficha ha sido compartida en 600.000 ocasiones, lo que triplica lo normal, porque se ha convertido en una desaparición muy mediática. Pero nosotros estamos haciendo nuestro trabajo como lo hacemos en todos los casos.

Estará de acuerdo en que no todas las desapariciones se investigan igual...

Si la pregunta es si hay desaparecidos de primera, segunda o tercera clase, sí, es así, hasta de quinta. Pero... ¿es culpa de la Policía? No. ¿Es culpa de la familia? No. Se juntan una serie de factores, el momento, la edad del desaparecido, la atención de los medios...

¿Enfrenta eso a las familias?

Hay familias que se sienten menospreciadas, pero la lucha no es criticar lo que está pasando para restar. No queremos que se quiten efectivos sino que se sumen. Restar no nos da un futuro.

¿Qué hace falta entonces?

Lo que necesitamos es que existan protocolos de actuación, medios humanos, técnicos y legislativos. Yo tengo un hijo desaparecido y en mi caso fue todo caótico, lo necesario para que una instrucción no prospere, pero vi la impotencia de los policías que trabajaban en el caso. Los vi llorar. Tenemos los mejores cuerpos de seguridad, los más profesionales. Lo que reclamamos son unidades especializadas en desaparecidos en cada provincia.

Díganos...¿cuándo debemos denunciar una desaparición?

Se debe alertar al momento, lo antes posible.

¿Nada de esperar 24 horas?

Afortunadamente eso fue así, pero ya no lo es. Cuando ves que un familiar ha roto su rutina y no regresa de inmediato, denuncia. Las primeras 48 horas son fundamentales para la investigación.

Usted les transmite a los familiares que "no hay que tirar la toalla" pero..., ¿cómo se vive con eso?

Es difícil transmitir los sentimientos. Nadie está preparado para una desaparición. Soñamos que un familiar, que un hijo nuestro tiene un accidente, una enfermedad o que muere. Nadie me ha contado nunca que haya soñado que su hijo desaparece. No estás preparado para eso.

¿Entonces?

Las familias aprendemos a sobrevivir desde el minuto cero.

¿Y cómo se hace?

Hay un antes y un después. Tienes por delante un duelo pero que no lo vas a poder cerrar porque uno no tiene el fin de ese duelo. Las familias pasan por varias etapas. La negación, el enojo, la negociación, el odio y, la última, la aceptación.

¿Se refiere a aceptar lo ocurrido?

Sí. Hay que aceptar la situación, no te digo que te rindas o que bajes los brazos. Cambias el odio por amor. Aunque sepas que a tu hijo lo han matado vas a defender el derecho a la verdad, el derecho a saber cuándo, cómo y por qué. Tu hijo va a desaparecer el día que tú le olvides.

¿En qué etapa del duelo está usted?

Mi hijo desapareció hace ocho años, yo estoy ya en la aceptación. La familia de la persona desaparecida jamás vuelve a la vida, es la realidad. Yo no he recuperado mi vida, pero para mí SOSdesaparecidos es mi hijo. Cuando defiendo a un desaparecido estoy defendiendo a mi hijo.

¿Y mantiene la esperanza?

En las familias hay dos partes. Se espera que el desaparecido regrese, pero también están los que saben que está muerto por un acto criminal. O porque conocían a la persona y saben que ese comportamiento es imposible en ella. Las familias que creen que el desaparecido puede regresar están en la esperanza. Las otras tienen la esperanza de la verdad.

Ambos casos son durísimos...

Lo más duro que he tenido que escuchar es cuando una madre me dice: "Joaquín no quiero morirme sin saber qué le paso a mi hijo".

Y para saberlo hay que aferrarse a todas las pistas...

Cuando nos llaman y nos dan una pista, la identificamos, la grabamos y se la pasamos a la Policía. Nunca a la familia. Hay personas con muy buena fe y voluntad, pero otras muchas pistas son veneno.

Y si ahora creyera algún lector haber visto a Diana o cree tener una pista importante sobre ella o sobre otro desparecido, ¿qué debe hacer?

Si se piensa que puede ser esa persona, siempre recomendamos intentar hacer una foto ahora que todo el mundo lleva cámara en el móvil. También intentar que otras personas la reconozcan.

Por su experiencia, la mayor parte de las desapariciones no resueltas (un 8%), ¿a qué responden?

Una parte de ellas son actos violentos.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento