Según informa la Policía en un comunicado, el detenido cuenta con un "largo historial" de denuncias por abusos sexuales a menores desde 2004, pero a pesar de varias imputaciones en ningún caso "se pudo concluir su autoría debido al miedo o vergüenza" a denunciar de las víctimas, así como a la corta edad de estas.

La investigación se inició tras la denuncia presentada por los padres del menor al creer que su hijo podría ser víctima de abusos. Tras un análisis del móvil de la víctima se encontraron archivos de carácter sexual intercambiados con el presunto agresor.

Tras ser detenido, al hombre se le intervinieron cuatro teléfonos móviles en su domicilio, que fueron enviados para su análisis a la brigada de la policía científica.

Durante la investigación se constató que en 2004 la exmujer del detenido había denunciado a este hombre por tocamientos a la hija de ambos, mientras que posteriormente una mujer presentó una denuncia en la que aseguraba que su hija de cuatro años había sufrido abusos por parte de este varón. Con todo, no se logró demostrar su autoría, según explica la Policía.

Esta investigación ha sido llevada por agentes del Grupo Operativo SAF, perteneciente a la brigada local de la policía judicial. Del caso se encarga el juzgado de instrucción número 2 de guardia en Vigo.