El barcelonés Hugo Ferrara lleva perdido en la selva brasileña casi seis meses, y la familia, que ya lleva gastados unos 17.000 euros en las pesquisas, pide el apoyo de los gobiernos españoles y brasileños para que aumenten los medios para localizarlo.

Ferrara desapareció el 20 de diciembre de 2015 en el parque nacional Chapada Diamantina de Brasil. Estaba haciendo un trayecto entre las localidades de Valle de Capao y Lençois, un trayecto lleno de bellos cañones, grutas y cascadas, que también presenta peligros como serpientes venenosas,  calor y grandes desniveles.

El barcelonés, de 27 años de edad, llegó a Brasil a principios de diciembre para hacer un viaje de mochileros. Pasó unos días en Chapada de los Veadeiros, en el estado de Goiana, y después se trasladó a Chapada Diamantina. Su objetivo era viajar desde Seabra hasta Valle del Capao, y de ahí a Lençois, en donde había reservado un albergue junto con un amigo finlandés, con el que seguiría de viaje de mochila por el país.

La ruta hasta Lençois suele hacerse en unos tres días. Entre el 18 y el 20 de diciembre sostuvo conversaciones por Whatsapp con su amigo finlandés, Kristian Helenius. Sin embargo, en la fecha fijada para el encuentro, Ferrara no se presentó en el albergue.

Helenius declaro a El Periódico que Hugo tenía mucha experiencia en senderismo. "Incluso sabía orientarse con las estrellas y ese tipo de cosas, no era ningún novato", dijo al diario catalán en enero.

La familia presentó la denuncia por su desaparición el 15 de enero en una comisaría de Barcelona. Desde entonces ha estado en contacto con las autoridades españolas y brasileñas para realizar la búsqueda, difícil tomando en cuenta que el parque nacional tiene una extensión de más de 152.000 hectáreas en plena selva brasileña.

Su hermana, Paola Ferrara, ha tenido que trasladarse hasta el país para tener noticias de primera mano sobre la búsqueda. En declaraciones a El Mundo, ha afirmado que ya llevan gastados 17.000 euros en la búsqueda, que se realiza con voluntarios, a los que sin embargo hay que pagar gastos durante las jornadas que emplean en localizar a Hugo.

Una de las principales demandas ha sido el uso de helicóptero, para trasladar a los voluntarios parque adentro. Un trayecto que por el aire dura solo 20 minutos y que, por tierra, alcanza las cuatro horas. En un primer momento, los bomberos de Bahía se ofrecieron, aunque luego lo cancelaron porque tuvieron que movilizarlo "para la antorcha olímpica". También la policía militar se ha negado a ceder una nave por cuestiones de papeleo.

La familia ha abierto hace unas dos semanas una petición en Change.org para que Exteriores español presione al gobierno brasileño para que ceda un helicóptero para las búsquedas.

Fuentes de la investigación en Brasil y del Ministerio de Exteriores español han declarado a El Mundo que las investigaciones continúan y siguen trabajando en el caso.