Un mes después del inicio de las obras, la Generalitat ha dado el visto bueno a la aprobación definitiva de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permitirá la construcción del nuevo Mestalla en la Avenida de las Cortes Valencianas.

El anuncio llega un mes después de que los camiones, excavadoras y hormigoneras hayan tomado el solar en el que se levantará el estadio. Los trabajos son tan intensos que ya han levantado las quejas de los vecinos del barrio . Las personas más afectadas son los residentes de las calles Nicasio Benlloch y Amics del Corpus, que denuncian ruidos de madrugada.

La comisión municipal de Urbanismo del próximo lunes, la primera que se celebra tras las vacaciones de verano, dará cuenta de la resolución emitida por la Consellería de Infraestructuras y Transporte sobre el nuevo estadio, según informaron ayer fuentes del Ayuntamiento de Valencia.

La Junta de Gobierno Local aprobó el pasado 27 de julio la permuta entre el Consistorio y el Valencia por la que la entidad deportiva obtuvo la parcela municipal de cerca de 70.000 metros cuadrados de la avenida de las Cortes Valencianas en la que se levantará el coliseo valencianista.

La totalidad de la parcela ocupa una superficie de 85.000 metros cuadrados, de los que 15.000 seguirán siendo propiedad del Ayuntamiento y en ellos se construirá, con cargo al Valencia, un polideportivo de uso público para el barrio.

Las obras del nuevo Mestalla empezaron en agosto y tienen una duración prevista de 24 meses, por lo que la inauguración del nuevo coliseo, que contará con 75.000 localidades distribuidas en tres gradas y con 3.000 plazas de aparcamiento, se prevé para el año 2009.