La consejera de Fomento, Elena de la Cruz, ha considerado que la Comunidad Valenciana "está en su pleno derecho" para personarse contra los recursos contencioso-administrativos que la Junta interpondrá contra las ordenes del Ministerio de Agricultura por las que se autorizaron trasvasar del río Tajo al Segura un total de 70 hectómetros cúbicos para los próximos meses y ha manifestado que "a pesar de algunas diferencias de opinión, hay puntos que unen" a ambas comunidades.

"Les hemos escuchado hablar de temas que nos gustan como la potenciación de la desalación y la mejora en la reutilización de las aguas depuradas que, si se potenciasen lo suficiente, ayudarían a mermar las aguas que se llevan del trasvase", ha comentado De la Cruz en declaraciones a los medios.

La consejera ha apuntado que la Junta respeta la decisión del Ejecutivo valenciano pero ha advertido de que el Gobierno regional "va a defender los intereses de los castellano-manchegos que Cospedal abandonó a su suerte durante cuatro años".

En este sentido, ha hecho hincapié en que el actual Ejecutivo presidido por Emiliano García-Page "ha tomado las riendas para defender los intereses de los castellano-manchegos y para tratar de establecer un diálogo".

A este respecto, ha recordado la idea del presidente regional de "propiciar un gran pacto entre todas las fuerzas políticas con representación en el Parlamento de Castilla-La Mancha para que exista unanimidad con respecto al agua como la hay en Valencia y Murcia".