La fiscalía belga ha aclarado que uno de los dos presuntos suicidas implicados en el aeropuerto de Bruselas es Brahim El Barkaui, de 27 años, pero ha desmentido que su acompañante sea su hermano Jakid, como informaban esta mañana diversos medios de comunicación belgas.

Asimismo, el fiscal ha confirmado que Brahim y el islamista que se inmoló en la estación de metro de Maelbeek sí eran hermanos.

Las mismas fuentes explicaban que los hermanos eran conocidos de la Policía antes del ataque al aeropuerto que dejó al menos 11 muertos y un centenar de heridos por la explosion de dos bombas en la terminal de salidas del aeropuerto de Zaventem.

Los dos hermanos estarían relacionados con los terroristas que atentaron en noviembre en París y habrían escapado de los controles antiterroristas de las últimas semanas. Uno de los hermanos, Jalid, había alquilado bajo una falsa identidad la vivienda de la calle du Dries en el barrio bruselense de Forest, donde el pasado 15 de marzo tuvo lugar un tiroteo en el que uno de los sospechosos murió y otros dos huyeron, entre ellos supuestamente Salah Abdeslam, implicado en los atentados de París y que fue detenido posteriormente.

Brahim El-Bakraui fue condenado a nueve años de prisión en 2010 después de disparar contra los agentes de policía tras un intento de robo en una oficina de cambio de divisas. En 2011, Jalid El-Badraui fue condenado a cinco años de prisión por intento de robo de automóviles .

La Policía ahora se centra en buscar "activamente" al tercer atacante, que aparece junto a los kamikazes en la única foto filtrada por las autoridades sobre los sospechosos. Se trata de un hombre vestido con ropa clara y con un sombrero, que en la imagen empujaba un carrito de equipaje.

Otro de los hombres más buscados por la Policía es Najim Laachraui, quien según algunos medios sería responsable de la confección de los cinturones explosivos utilizados en los ataques de la capital francesa.

Estado Islámico reivindicó los ataques en el aeropuerto y en la estación de metro en Bruselas que han costado la vida a una treintena de personas y heridas a más de 200.

Los medios de comunicación belgas también informan de que declaración policial del taxista que trasladó a los sospechosos hasta el aeropuerto de Bruselas ha sido clave. Los condujo desde un barrio en el que se han llevado a cabo los primeros registros domiciliarios. El taxista explicó que no le dejaron tocar en ningún momento ninguna de las cuatro maletas que portaban.

Por otra parte, las fuerzas de seguridad belgas han encontrado en Bruselas un ordenador que contiene mensajes ligados al Estado Islámico (EI), señaló el diario belga La Libre Belgique. La policía local de Bruselas ha entregado de urgencia el ordenador a las unidades antiterroristas de la policía judicial federal de Bruselas tras haberle sometido al análisis.