La Diputación de Guipúzcoa ha prohibido la pesca, el baño y el uso de embarcaciones en todos los ríos y embalses de Guipúzcoa para evitar la expansión del mejillón cebra, ya que cualquier objeto que haya estado en contacto con aguas donde existe esta especie puede ser vehículo de transmisión de sus larvas.

Estas medidas se suman a las adoptadas por la Consejería vasca de Medio Ambiente, que ha acotado el embalse de Lareo, en el municipio guipuzcoano de Ataun, y ha prohibido el acceso de bañistas y excursionistas con la intención de aislarlo, tras la detección por parte de la Confederación Hidrográfica del Norte de larvas de esta especie invasora, que por primera vez han llegado a cuencas cantábricas.

El departamento foral de Desarrollo del Medio Rural de Guipúzcoa precisó hoy en un comunicado que, con este fin, se ha modificado la normativa de pesca en los embalses, que permitía desarrollar esta actividad hasta el próximo 30 de septiembre, mientras que en los ríos la prohibición está ya vigente porque el periodo de pesca finalizó el pasado 31 de julio.

En ambos casos no se podrá realizar esta práctica deportiva

Estas decisiones de carácter preventivo intentan evitar la extensión del mejillón cebra a otros embalses o ríos de Guipúzcoa y se basan en el riesgo que supone la pesca como medio de dispersión de esta especie, dado que cualquier elemento como botas, salabardos, recipientes o embarcaciones que hayan estado en aguas de otro lugar donde existe este molusco pueden ser vehículo de transmisión de sus larvas, que apenas miden la décima parte de un milímetro.

Precisamente la pesca o alguna actividad relacionada con ella pudo ser el origen de las larvas aparecidas en el embalse guipuzcoano que, según la Confederación Hidrográfica del Norte, pudieron ser trasladadas involuntariamente en una sola ocasión.

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