La soprano y el director de la Orquesta Bandart, Gordan Nikolic, explicaron los proyectos de futuro de la cantante y la orquesta para los próximos años, así como las características del concierto que ofrecerán mañana en Segovia. Hendricks aseguró que la decisión de

Indicó que ella misma eligió este templo románico de Segovia, que es uno de los más importantes espacios escénicos de la capital, tras actuar en él hace dos años, y aseguró que la acústica de la iglesia de San Juan de los Caballeros es "un regalo, porque te permite llevar hasta el límite lo que has probado en los ensayos con las distintas piezas".

Idilio musical

En cuanto a su trabajo con la orquesta Bandart, Hendricks señaló que hace algún tiempo vivió un "idilio musical" con su director, Gordan Nikolic, que comenzó en Tokio tras un concierto con la orquesta Mozart que entonces dirigía el músico serbio.

En esa actuación, Hendricks aseguró que "percibí algo especial; porque muchas orquestas se limitan a dar las notas, y algunas lo hacen muy bien, pero allí pasaban muchas más cosas que dar una nota detrás de otra", sostuvo.

A partir de este momento, la cantante, nacida en Estados Unidos pero de nacionalidad sueca, quiso trabajar con la orquesta de jóvenes músicos que dirige Nikolic, un proyecto que integra a medio centenar de músicos de entre 16 y 40 años, y procedentes de quince países distintos.

Nacida en Arkansas en 1948, Barbara Hendricks está considerada una de las mejores sopranos del mundo, con un repertorio que abarca más veinte personajes de ópera.

En el año 2000 recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Artes y además desarrolla una intensa labor humanitaria, fundamentalmente en apoyo a los refugiados.