La consejera de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Castilla-La Mancha, Reyes Estévez, ha señalado que para poder cambiar el criterio de zona única de escolarización tiene que convocar a las mesas de padres y a los ayuntamientos y que "en cinco meses no se puede actualizar el sistema", pues "para ponerlo en marcha hace falta un año".

De este modo ha reaccionado la consejera de Educación, a preguntas de los medios durante la rueda de prensa que ha ofrecido, después de que el secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, José Luis Gil, criticase que la Junta no haya derogado el criterio de zona única de escolarización, una medida que se le antoja "clasista, injusta y segregadora" y que a su modo de ver "lleva el sello de Cospedal", instándole a que la derogue "cuanto antes".

Luego de asegurar que el Ejecutivo autonómico comparte el planteamiento de CCOO, Estévez ha defendido que establecer áreas de escolarización contribuye a conseguir la "equidad" pero que reconstruir todo lo que el Partido Popular ha destruido "no es sencillo". Además ha explicado que esa modificación hay que hacerla en base a la legalidad. "No son excusas", ha añadido.

Así las cosas, ha manifestado que para modificar ese criterio su departamento tiene que convocar a las mesas de padres y a los ayuntamientos, aunque no todos los consistorios consideran que la aplicación de ese criterio sea necesaria pues tienen plazas suficientes.

Además, ha indicado que la Consejería también tiene que actualizar callejeros y sobre todo las secciones bilingües, porque existe el "grave" problema de que los institutos bilingües ofrecen menos plazas que las que disponen los colegios en los que se imparten ese tipo de enseñanzas.

"Es imposible poner en marcha esa actualización en cinco meses cuando el PP ha necesitado dos años para destruirlos", ha asegurado la consejera.

No obstante, Estévez ha dicho que le "sorprende" la crítica por parte de Gil, pues ha asegurado que el diálogo con los sindicatos es "fluido y casi a diario". "Cada uno es libre de decir lo que quiera con respeto. Nosotros como Gobierno tenemos que explicarlo, pero tendrían que haberlo preguntado", ha defendido.

"No sé si esas críticas las ha motivado la apertura de las escuelas rurales, las becas de comedor, la gratuidad de los libros de texto, que haya más profesores o que se cubran antes sus sustituciones" ha ironizado la consejera en respuesta a Gil.