Para tener un hijo importa más el sueldo que el tiempo

Las andaluzas deciden ser madres con un trabajo bien remunerado, pero si la nómina es demasiado alta ni se lo plantean. Las autónomas tienen menos posibilidades que el resto.

¿Qué pasa por la cabeza de las andaluzas antes de decidirse a ser madres? Tener un trabajo y un sueldo en condiciones son razones mucho más poderosas que disponer de tiempo para criarlos. Así lo concluye un informe del Centro de Estudios Andaluces que echa por tierra la teoría de que el trabajo tiene una relación negativa con la maternidad.

Hoy por hoy, el índice de fecundidad de las andaluzas es de 1,5 hijos (frente a los 3 de 1975), mientras que la media nacional está en 1,3. Una diferencia que se justifica por la baja tasa de empleo femenino de la región, por lo que cabría esperar mayores descensos de la natalidad a medida que las mujeres consigan trabajo. Pero los autores del estudio, Alfredo Ariza (UPO) y Aranza Ugidos (UPV), aseguran que tener un salario favorece –y no entorpece– la maternidad. Y es más, compensa el poco tiempo para poder criarlos. En el estudio analizaron el efecto de la nómina y la renta en la fecundidad tomando un grupo de mujeres de 17 a 35 años sin hijos (de toda España). Las andaluzas, incluso, le dieron un valor mucho más alto al sueldo que las de Madrid, tal vez por el paro y los bajos salarios de aquí.

Eso sí, la cosa cambia si la mujer en cuestión ya gana mucho; ni se lo plantea en ese momento, señala el informe. Otras en desventaja son las autónomas: tienen menos probabilidades de tener un hijo que quienes están indefinidas. Sufren lo mismo las desempleadas y las temporales.

Los estudios es otro factor  a tener en cuenta. La mujeres con estudios primarios son más proclives a la descendencia. Las universitarias, menos, pero más que las que han terminado Secundaria.

Y como hace treinta años, en la decisión pesa mucho estar casada. Incluso más que la renta del futuro padre.

Las ayudas, incentivo de solteras

Aumentar el salario femenino por maternidad podría lanzar a muchas mujeres a tener su primer hijo. De ahí que las subvenciones públicas sean vitales; y cuanto más altas, mejor. Los autores del estudio concluyen que las ayudas deben ser muy superiores a las actuales si se quiere que cumplan su objetivo. Y aunque el informe es previo al anuncio del Gobierno de dar 2.500 euros por niño, incide en que 100 euros extra del sueldo estimularía sólo un 5% la maternidad. Y el efecto en el colectivo de solteras es mucho mayor que en las casadas.

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