Pese a las bajas temperaturas de este mes de julio en Galicia (23,9 grados, de media), no se ha superado el mínimo histórico registrado en 1977, cuando, según Meteogalicia, la máxima media fue de 19,8 grados. Pero tampoco hace falta remontarse 30 años para encontrar un mes de julio más fresco que el actual. En 1983 los termómetros de Pontevedra marcaron un máximo de 22,7 grados. En cuanto a las lluvias, según los meteorólogos, este mes no está siendo el «más lluvioso de la historia, ni muchísimo menos». De hecho, recuerdan que «en 2003 hubo más lluvias». Según la previsión, esta semana en los cielos gallegos se impondrán los claros sobre las nubes tanto en el norte como en el sur, aunque los termómetros no llegarán a los 30 grados ni siquiera en las localidades del interior de la comunidad.