España se ha consolidado en 2015 como mercado inmobiliario de destino de los inversores internacionales, que concentran el 70% de los 13.000 millones de inversión total. Son datos de la compañía de consultoría y servicios inmobiliarios CBRE, que ve que los precios están subiendo y las rentabilidades van a la baja, fruto de la presión compradora y de la escasez que existe de determinados tipos de productos.

Por eso, el director nacional de Capital Markets de CBRE, Mikel Marco-Gardoqui, prevé que las inversiones se diversifiquen por tipología y geográficamente, así como que los operadores que invierten en activos inmobiliarios destinen dinero a mejorar la calidad de los mismos, a través de reformas, para poder obtener un retorno adicional.

Unas de las novedades en 2015 ha sido que el suelo vuelve a estar en el “punto de mira” de los inversores, al poderse comprar a precios bajos y obtener rentabilidades más altas, según Julián Labarra, responsable de Corporate Finance en CBRE. Asegura que no se trata tanto de operaciones de venta de suelo, sino de venta de carteras de deuda por parte de la Sareb y de entidades bancarias, que tienen como subyacente un bien inmobiliario o suelo.

Dice Labarra que “los inversores se están enfocando a comprar con mucho descuento y vender a promotores activos” que puedan hacer las construcciones en uno o dos años. En su opinión, la recuperación del sector residencial y del suelo “irá a mucho más” el año que viene, porque el suelo “está dejando de estar estancado en los bancos e ir a manos de los inversores”. Marco-Gardoqui apunta que esas inversiones en suelo y nuevas promociones están siendo muy selectivas.

A pesar del creciente interés por el suelo para promoción residencial, en España sigue siendo el sector de las oficinas el que más inversión concentra. Las oficinas suman 5.600 millones dentro de la inversión total de 13.000 millones prevista para 2015, cifra en la que se incluye la venta por OHL de Torre Espacio al grupo filipino Emperador, que ascendió a cerca de 600 millones de euros. España ya ocupa el cuarto lugar en inversión en oficinas en Europa, a gran distancia de Reino Unido y a algo menos de Alemania y Francia, aunque se ha distanciado de Italia, a la que doblaba al cierre del tercer trimestre.

Respecto al perfil de inversor inmobiliario, Heriberto Teruel, otro de los responsables de Corporate Finance, explica que los grandes fondos están reubicándose ante el nuevo momento del mercado inmobiliario, de forma que los “fondos oportunistas” que buscan grandes rentabilidades están saliendo de los activos donde ya hay menos margen de ganancias y se van a otros donde las encuentran, pasando a ocupar el lugar que dejan fondos que, como los alemanes, buscan mercados “tranquilos” y de mayor seguridad.