La Fiscalía de Cantabria ha pedido el internamiento de la mujer con esquizofrenia paranoide que, en un brote, retuvo el año pasado a un niño de 3 años se encontraba en la calle Burgos de Santander con sus padres y que, en un descuido de éstos, intentó llevárselo pero fue sorprendida por la Policía, hechos que serán jzugados el proximo martes, 24 de noviembre, a partir de las 9.30 horas, en la Sección Primera Audiencia Provincial.

El suceso ocurrió el 31 de agosto de 2014 cuando los padres perdieron un instante al niño mientras miraban un escaparate. Fue en ese momento, cuando la mujer, de 52 años, con iniciales A.L.Z. y sin domicilio aprovechó para llevarse al niño que, según relató en su día la Policía Nacional, comenzó a llorar y resistirse lo que llamó la atención de los agentes que realizaban labores de seguridad en la zona.

Según el escrito del fiscal, la mujer agarró al niño "con fuerza" al niño para que no pudiera moverse y escapar, llevándoselo por la calle pero sin que consiguiera su objetivo debido a la intervención de los agentes.

En base a la versión de la Policía, la mujer llevaba al niño agarrado de tal forma que "no podía moverse" y, al ser preguntada qué ocurría por los integrantes de la dotación policial, contestó "que la dejasen en paz, que era su hijo y que se lo llevaba a casa".

Los agentes consiguieron arrebatar al niño de los brazos de la mujer y entonces el menor les dio su nombre y el de sus progenitores y les dijo que "no conocía de nada a la mujer".

Según la Policía, en ese momento, la mujer "cambió la versión" y les dijo que no era su hijo, sino su nieto, y les relató que se lo habían quitado a su hijo y que ella iba a devolvérselo.

A través de la Sala del 091 se realizaron gestiones para localizar a los padres, que resultaron infructuosas.

Según el relato de la Policía, éstos, "muy asustados", habían estado buscando a su hijo por los alrededores desde que se percataron de su falta y finalmente se acercaron a los policías para denunciar la desaparición y hallaron al niño con ellos.

El niño fue reintegrado a sus padres en custodia y la mujer arrestada por un delito de detención ilegal.

Para el fiscal, estos hechos, efectivamente, constituyen un delito de detención ilegal en grado de tentativa pero para el fiscal constituye la circunstaancia de eximente completa dado que la acusada, conforme al diagnóstico médico, se encontraba con sus facultades volitivas y cognoscitivas "profundamente afectadas".

Por ello, procede la libre absolución de la imputada y entiende procedente acordar el internamiento en centro adecuado a su padecimiento pot un tiempo que —pide— no exceda los dos años. Reclama que la mujer no podrá abandonar el centro sin autorización judicial.

La defensa muestra su disconformidad con el escrito de acusación al considerar que los hechos manifestados en el escrito "no son ciertos", ni constitutivos de ningún delito ni falta, ni de ellos son responsables por lo que procede la libre absolución.

En el juicio declarará la acusada, los peritos y testigos, entre ellos los agentes de policía.