Centros Infantiles convocados por la Federación de Centros de Enseñanza Feceval, se han referido al programa de aulas de 2 años en centros públicos de Infantil y Primaria de la Comunitat como "nuevos experimentos" de al Conselleria de Educación frente a los que contraponen sus "décadas de experiencia" en el sector.

Un centenar de centros de Educación Infantil de Primer Ciclo han analizado la situación del sector en la Comunitat en un encuentro con representantes de los responsables de centros asociados a Feceval de Educación Infantil de Primer Ciclo ante la puesta en marcha del proyecto piloto auspiciado para la escolarización de niños de 2 años.

El encuentro, informa el colectivo en un comunicado, contó con las intervenciones del presidente de la patronal, José Manuel Boquet Esplugues; el director gerente, Víctor P. Villagrasa Ballester, y el asesor jurídico, Juan José López Marinas, que al final abrieron un amplio turno de intervenciones que "evidenciaron cierta incertidumbre en el sector afectado, pero que se compensa con el hecho de saber fehacientemente que cuenta con la confianza de los padres y las familias que reclamarán siempre y por encima de cualquier veleidad su derecho a decidir el centro donde han de estudiar sus hijos", aseguran.

"eliminar los barracones"

Para Feceval, "la administración debería eliminar los barracones antes de embarcarse en otros proyectos educativos". La entidad añade que "el sector de la educación privada concertada afronta los nuevos experimentos de la Conselleria de Educación con la convicción que les da las décadas de experiencia en cualquiera de los segmentos educativos, pero especialmente en el primer ciclo de 0 a 3 años considerado modélico en el resto de España".

En este sentido, defiende que "los sistemas pedagógicos implantados, la especialización del personal docente, la adaptación de los espacios y otros innumerables aspectos, hacen por sí mismo que sea muy difícil que el sector público pueda llegar al marco de excelencia conseguido y que hace ejemplar la aplicación del modelo oficial".

Y concluyen: "si a lo expuesto se le suma el extraordinario esfuerzo del sector privado por hacer posible la conciliación familiar con la laboral, ofertándoles a los padres un horario tan amplio y flexible como sus circunstancias exijan; se hace evidente que nadie acepte un retroceso en pérdida de derechos y libertad elección".