Caixa Galicia les propone buscar otra solución. Los vecinos de la calle Faro que la semana pasada denunciaban que Caixa Galicia no les cedía unos metros para instalar un ascensor en su edificio deberán seguir esperando por el ansiado elevador.Desde Caixa Galicia confirmaron que les han dicho a los vecinos que «busquen otra solución» con el arquitecto. «En ningún caso se les ha impedido poner un ascensor», reiteraron desde la entidad financiera. En el edificio, de cuatro plantas, viven personas mayores y familias con niños. Incluso hay una señora que lleva año y medio sin salir de casa porque no puede bajar las escaleras.