La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha condenado a 8 años de prisión a M.P, de nacionalidad belga, por el delito de detención ilegal, así como de extorsión y de robo con fuerza en las cosas a su ex pareja, T.F.L., en Gran Canaria.

Los hechos se remontan a 2009, año en el que la acusada M.P terminó una relación sentimental con T.F.L. y meses después, conocedora de las finanzas de T.F.L., por la relación que había mantenido con él, idea un plan junto al acusado A.D.N.G. y el condenado por estos hechos B.J.F.P. para que la ex pareja de M.P. les entregara la mayor cantidad de dinero posible durante el tiempo que lo retuvieran en contra de su voluntad.

Para lograr retenerlo, M.P llamó a su ex pareja haciéndole creer que tenía interés de retomar la relación sentimental, por lo que fijaron un lugar para una cita para reunirse ambos el 16 de mayo de 2010 a las 22.00 horas, según recoge la sentencia.

Sin embargo, T.F.L., que se desplazó desde la isla de Fuerteventura, acudió al aparcamiento anexo a un restaurante situado en Playa del Águila, en San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), pero al llegar al aparcamiento en lugar de encontrarse con M.P., se encontró a A.D.N.G. y B.J.F.P., a quienes T.F.L. conocía el primero por ser pareja de la mujer y el segundo por ser el padre de la hija de ella.

Ambos sabían, a través de M.P., que T.F.L. acudiría al lugar por haber concertado una cita con ésta. Así, en el momento que T.F.L. llega al aparcamiento, los dos conocidas de su ex pareja le golpean el turismo y A.D.N.G. se introduce en el vehículo y portando un arma de fuego le obliga a conducir hasta una zona deshabitada situada en el Barranco del Águila, mientras B.J.F.P. les siguió en otro vehículo hasta el descampado.

Posteriormente, en el descampado, golpearon a T.F.L. en la cara con la pistola y con los puños en diversas partes del cuerpo y, "con intención de enriquecerse" de forma ilícita, le forzaron para que les entregara dos tarjetas bancarias y, tras obligarle a revelar el número secreto de ambas, A.D.N.G. realizó en la madrugada del 19 de mayo de 2010, diversos cajeros de la zona, un total de 15 extracciones de 300 euros cada una, lo que supone 4.500 euros, ocasionándole unos gastos por comisión de 45 euros.

Sin embargo, decidieron mantener retenido a T.F.L. toda la noche del 19 de mayo hasta las 09.00 horas, cuando tras proporcionar la mujer a A.D.N.G. su número de cuenta por teléfono, le conminan a llamar a un banco suizo en el que tiene una cuenta bancaria abierta y realizar una transferencia a otra cuenta de la que la mujer es titular por valor de 15.000 euros (el máximo permitido), además de sustraerle a T.F.L. un teléfono móvil, un ordenador y un disco duro que han sido pericialmente tasados en 975 euros.

Asimismo, y tras todo lo ocurrido, A.D.N.G. trasladó al afectado a la Clínica Roca para volver el acusado al apartamento que había alquilado la mujer y donde se hospedaban los tres, si bien los dos hombres abandonarían la isla horas después hacia Sevilla y de allí a Málaga.

El afectado, T.L., sí pudo anular la transferencia de 15.000 euros esa misma mañana, reintegrándola en su cuenta. Además, el afectado debido a los golpes que recibió sufrió lesiones consistentes en traumatismo craneofacial con fracturas en la base del cráneo y macizo facial, fractura en la meseta tibial derecha y lesión del ligamento deltoideo del tobillo derecho que requirieron para su sanidad de tratamiento consistente en intervención quirúrgica que tardó en curar sus lesiones 374 días, todos ellos de carácter impeditivo, 11 de ellos hospitalizado y con secuelas en limitación de movilidad de la rodilla derecha en grado leve y material de osteosíntesis.

La sentencia también recoge la condena para A.D.N.G de 13 años de cárcel y 24.975 euros de indemnización para T.L., así como 4.545 euros de forma conjunta con M.P.