Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Alicante y Orihuela han detenido a once personas como presuntas integrantes de un grupo dedicado al robo de vehículos, robos con violencia y uso fraudulento de tarjetas de crédito que actuaban en Alicante, Castellón, Murcia, Navarra y Tarragona, entre otros lugares.

En un comunicado, fuentes de la Policía Nacional indicaron que los arrestados son todos de nacionalidad rumana y que las detenciones han permitido esclarecer "un gran número de hechos delictivos", la mayoría contra el patrimonio y el orden social.

Sospechas

Las investigaciones comenzaron el pasado mes de mayo después de que el director de un banco de Orihuela alertara de la presencia de varios individuos extranjeros en su sucursal, quienes realizaron preguntas "totalmente fuera de lugar" y volvieron al día siguiente con una "actitud de vigilancia" sobre la entidad.

Tras las correspondientes investigaciones, los agentes comprobaron que uno de los vehículos que utilizaban los sospechosos había sido sustraído un mes antes en Torrevieja y, después de lograr identificar a todo el grupo, se intensificó la vigilancia en torno a ellos.

Así, los agentes constataron que la mayoría tenía antecedentes policiales, así como reclamaciones judiciales y policiales en vigor, en algunos de los casos.

Entre otros hechos delictivos, al grupo ahora desarticulado se le atribuyen varios hurtos en las comarcas de La Marina en los que, tras hacerse pasar por empleados del Ayuntamiento, solicitaban a ciudadanos extranjeros que enseñaran sus monederos para comprobar su identidad y se los sustraían.

Alquilaban vehículos para robar

También alquilaban vehículos que utilizaban para desplazarse a otras poblaciones donde cometían tirones, hurtos y robos en interior de vehículos; robaban en establecimientos usando bolsas forradas con papel de aluminio para evitar los sistemas de seguridad, y robaban por encargo para después enviar a Rumanía los objetos sustraídos.

Las citadas fuentes destacaron que este grupo organizado adoptaba "grandes medidas de seguridad" durante sus viajes en coche y en sus desplazamientos a pie "por el continuo seguimiento de que venían siendo objeto" tanto por la Guardia Civil, como por el Cuerpo Nacional de Policía.

En este sentido, apuntaron que se les atribuyen hechos delictivos en la provincia de Alicante y en otros lugares del territorio nacional como Castellón, Murcia, Tarragona y Navarra.

El pasado día 20 de junio, se estableció un dispositivo policial en los domicilios que concluyó con las detenciones y, tras efectuar los correspondientes registros en los domicilios, los agentes encontraron teléfonos móviles, ordenadores portátiles, joyas y un total de 7.500 euros.

Asimismo, hallaron numerosas prendas de ropa, gafas de sol, mochilas y bolsos forradas con papel de aluminio para eludir los sistemas de seguridad en los establecimientos comerciales, y un escudo de la Guardia Civil que podría haber sido utilizado para hacerse pasar por miembros de este cuerpo.