El candidato del Partido Popular en Pontevedra, Jacobo Moreira, ha afirmado tras conocerse los resultados electorales, que dejan a su formación con 7 ediles frente a los 12 del BNG, que "ahora mismo" no se plantea la dimisión, pero ha dicho que asume "todas las responsabilidades".

Los siete concejales que consiguió el PP en estos comicios, cuatro menos que en 2011, constituyen, ha dicho, un resultado "desfavorable para esta formación". "Y aunque no nos guste, ni haya sido como esperábamos, debemos asumir esta situación", ha añadido.

Moreira ha asegurado desconocer los motivos de estos resultados y ha pedido tiempo para poder analizar "mesa por mesa" lo ocurrido en esta cita electoral, "para poder ver en qué no se ha acertado y por qué no se ha conseguido llegar a todas las personas"

"Debemos aceptar este resultado porque así lo han decidido los ciudadanos de Pontevedra", ha repetido el candidato del Partido Popular, que ha comparecido minutos antes de las 23,00 horas en la sede local, que hasta esa hora había permanecido vacía, con los miembros de la candidatura acantonados en un despacho.

Moreira ha señalado que con el resultado del Ayuntamiento de Pontevedra, en el que el Bloque de Miguel Anxo Fernández Lores consigue 12 concejales, el PP 7, PSdeG 3, Marea 2 y Ciudadanos 1, "ahora solo se debe pensar en Pontevedra, en lo mejor para la ciudad y para los pontevedreses", un empeño en el que ha dicho que se va volcar "todo el equipo del Partido Popular" y él "personalmente".

En cuanto a la irrupción de nuevas fuerzas políticas en la corporación de la ciudad del Lérez, Jacobo Moreira ha reconocido "cierta sorpresa", aunque leyó esta novedad en un contexto nacional.

Telefoneó a lores

El candidato popular telefoneó para felicitar al "justo vencedor", el actual alcalde y candidato del BNG a la reelección, Miguel Anxo Fernández Lores y ha reconocido que "los ciudadanos le han votado masivamente", aunque ha apostillado que "es verdad que no con mayoría absoluta".

Al terminar su comparecencia, Moreira salió de la sala de prensa siendo reconfortado con un aplauso por parte de sus compañeros de candidatura, la mayoría de ellos con lágrimas en los ojos.