"Aragón es una de las Comunidades Autónomas que está liderando la salida de la crisis", ha asegurado este lunes en Madrid la presidenta del Ejecutivo autonómico, Luisa Fernanda Rudi, en el marco de 'El Ágora de Aragón', sesión promovida por el diario 'El Economista'.

Rudi ha descrito a la Comunidad como seria, rigurosa y fiable, capaz de sumar y unir, nunca restar y dividir y "propietaria" de un tejido productivo más abierto al exterior que la media nacional. En definitiva, un territorio para invertir.

La presidenta ha expuesto que el PIB regional creció un 1,7% en 2014, tres décimas más que el promedio nacional (1,4%). Aragón fue pionera en diseñar y aplicar un Plan de Racionalización del Gasto Corriente y un Plan de Reestructuración del Sector Público Empresarial.

El actual Gobierno de Aragón ha equilibrado las cuentas de la Comunidad Autónoma, reduciendo un 20% en 2014 frente al Presupuesto de 2011 y manteniendo a la par la calidad en los servicios públicos elementales para la ciudadanía.

Por ello, es una de las Comunidades con mejor acceso a financiación en los mercados crediticios y de capitales. También el Ejecutivo ha aprobado incentivos fiscales para fomentar la actividad económica en el tramo autonómico del IRPF y en algunos tributos propios.

Luisa Fernanda Rudi ha agregado que "Aragón cuenta con una presión fiscal inferior al promedio nacional, que en 2015 será incluso menor que el año anterior". Además, ha dicho, "hemos confeccionado y puesto en marcha la Estrategia Aragonesa de Competitividad y Crecimiento, que aglutina y coordina las medidas de estímulo de la actividad económica que articula el Gobierno de Aragón, dotada con más de 500 millones de euros en el presente 2015".

Aragón posee una ubicación estratégica, en el centro del 60 por ciento del PIB y la población española; un diálogo fluido entre Gobierno, agentes sociales y sindicatos; tradición industrial y de exportación; centros tecnológicos y de investigación de vanguardia; calidad, productividad y fidelidad del capital humano; y, por último, cercanía de las Administraciones Públicas a las empresas. "Aragón es un lugar de inversión", ha precisado.

"Tenemos la fortuna de contar con un buen número de empresas de distintos tamaños (grandes, PYMES y emprendedores), estructuras de propiedad (multinacionales, cotizadas españolas, familiares) y sectores (automoción, logística, agroindustrial) que son el auténtico motor de la economía aragonesa", ha destacado.

ESFUERZO

En el conjunto de España, tras la crisis más prolongada y profunda que ha vivido el país, nos encontramos con una economía que crece y una confianza plena de los mercados financieros. Sin duda, esta recuperación es el resultado de una serie de esfuerzos públicos y privados, individuales y colectivos que las sociedades española y, en este caso, la aragonesa han realizado durante los últimos tres años.

Este proceso ha pivotado, en opinión de Luisa Fernanda Rudi, sobre dos ejes básicos, como son la consolidación fiscal y la reestructuración de la Administración llevada a cabo por el Gobierno de España y los Gobiernos de la mayoría de las Comunidades Autónomas, entre ellas, Aragón, que ha devuelto la sostenibilidad a las cuentas públicas. "Unas cuentas públicas que, en 2010, eran totalmente insostenibles", ha aseverado la presidenta.

Para ello, ha sido preciso adoptar y ejecutar decisiones tan impopulares y no siempre comprendidas, como imprescindibles para retomar la senda del crecimiento. Los "experimentos" políticos contrarios a las mínimas normas de respecto a la propiedad privada y a la libertad del tráfico mercantil son, a mi juicio, el gran riesgo que amenaza la consolidación del crecimiento de la actividad y del empleo en España, ha estimado Rudi.

En la sesión 'El Ágora de Aragón', que ha tenido lugar en la sede del Club Financiero de Madrid, también han intervenido, narrando sus respectivos testimonios empresariales y la potencialidad de la economía aragonesa, el director general de GM España, Antonio Cobo; el consejero delegado de Pikolín, José Antonio González, y el director general de Bauhaus, Bart Ginneberge.