La Guardia Civil ha interceptado a un individuo, de 43 años, que conducía un camión cargado con 40 toneladas de hortalizas que transportaba desde Molina de Segura hasta San Agustín de Guadalíx (Madrid), bajo los efectos de la cocaína y con el tacógrafo manipulado.

La actuación se ha desarrollado en un control específico de camiones, autobuses y furgonetas en la carretera N-301, que une las localidades de Madrid y Cartagena, a la altura de Ulea.

Los hechos se produjeron cuando una patrulla de motoristas del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Cieza, especialistas en la inspección de transportes, detectó en un control que el conductor de un vehículo articulado había falseado las anotaciones del disco-diagrama y que, además, mostraba un comportamiento extraño.

Presumiendo que el conductor hubiera ingerido alguna tipo de droga o sustancia estupefaciente incompatible con la conducción los guardias civiles le sometieron a la preceptiva prueba de detección de drogas en saliva, la cual arrojó un resultado positivo en cocaína, por lo que le fue obtenida una segunda muestra de fluido oral para su remisión a un laboratorio acreditado para contrastar este primer resultado provisional, conforme a la normativa vigente.

Por este motivo, el conductor del vehículo articulado, que transportaba hortalizas fue denunciado ante la Jefatura Provincial de Tráfico de Murcia por una infracción regulada en la Ley de Seguridad Vial, al conducir un vehículo con presencia de drogas en el organismo, hecho que, tras la reciente reforma de la citada Ley, está sancionado con una multa 1.000 euros y la pérdida de seis puntos de su permiso de conducción.

A consecuencia de estos hechos, el vehículo fue inmovilizado temporalmente, evitando que se hubiera producido un accidente de circulación de resultado imprevisible, dada la peligrosidad que comporta la conducción de un vehículo de gran tonelaje en estas condiciones y la merma de reflejos que la ingestión de drogas conlleva.

Poco después se desplazó hasta el lugar un conductor alternativo que, tras comprobar que reunía los requisitos legales para la conducción de este tipo de vehículos y que se encontraban en las condiciones adecuadas para hacerlo, pudo continuar su ruta.

Asimismo, a este conductor le ha sido formulado un boletín de denuncia, ante la Dirección General de Transportes, Costas y Puertos de la Comunidad por falseamiento de las anotaciones en el disco-diagrama del tacógrafo, que implica una multa de 4.001 euros.

Con la alteración de los datos de registro de disco-diagrama del tacógrafo el conductor modifica a su voluntad el régimen de conducción y descanso obligatorios, establecidos para los vehículos destinados al transporte de mercancías y viajeros. Estas alteraciones tienen la finalidad de permitir realizar jornadas de trabajo muy superiores a las permitidas con un considerable riesgo para la seguridad vial.